La Generalitat Valenciana ha paralizado las obras de rehabilitación que el Ayuntamiento de Elche estaba realizando en la casa anexa a la torre de La Calahorra, para cederla a la Asociación Festera de Moros y Cristianos, tras el embargo de su sede. El Consell toma esta medida porque el tripartito no informó a la Conselleria de Cultura de las obras, pese a estar obligado a ello.
El inmueble, que es propiedad del Consell, forma parte del conjunto histórico que hace varios años la Generalitat cedió al Ayuntamiento para que lo abriese al público y le diese un uso cultural. Esta cesión se materializó durante la etapa de Mercedes Alonso al frente del Ayuntamiento ilicitano.
La cesión está respaldada legalmente por un convenio sellado por las administraciones local y autonómica, en el que quedó establecido que el Ayuntamiento sólo tiene autorizado el uso del conjunto, y que si tiene, o quiere, realizar alguna otra actuación debe informar a la Conselleria de Cultura.
Sin embargo, la Conselleria de Vicent Marzà tuvo conocimiento de las obras de reforma y acondicionamiento que puso en marcha el Ayuntamiento en la casa anexa a La Calahorra a través de la información publicada en este periódico el pasado viernes, lo que no ha gustado nada en València.
De hecho, la primera reacción del departamento autonómico de Cultura ha sido ordenar la paralización de los trabajos que se estaban llevando a cabo hasta el viernes en la casa anexa a La Calahorra, donde antiguamente había un establecimiento de hostelería.
En este sentido, desde la Conselleria de Cultura aseguraron ayer a este diario que «el viernes pasado los servicios territoriales de Alicante conocieron la noticia de que se estaban realizando unas obras en la casa anexa al edificio de La Calahorra de Elche y se instó al Ayuntamiento a paralizar las obras que tenían que haber sido comunicadas a la Conselleria».
Paralizadas las obras, el edificio recibió ayer la visita de un arquitecto de los servicios territoriales de la Generalitat, que realizó una inspección en la zona. En la casa anexa se está llevando a cabo la renovación del pavimento, y trabajos de rehabilitación del techo, y de las instalaciones, según informaron fuentes municipales.
Una vez que el arquitecto de la Generalitat Valenciana concluyó la inspección al inmueble, indicó que los trabajos que está llevando a cabo el Ayuntamiento en el inmueble, que tiene entrada por la calle Trinquet, no tienen ninguna transcendencia patrimonial para la torre de La Calahorra al tratarse de obras de mantenimiento y conservación.
No obstante, la Conselleria de Cultura ha requerido al Ayuntamiento de Elche el correspondiente informe municipal, en el que se dé cuenta del proyecto que se está realizando para que así conste en los servicios territoriales de Alicante.
Complejo
La torre de La Calahorra, una fortaleza islámica, es el edificio que tiene un mayor nivel de protección, pero la casa anexa forma parte del conjunto histórico, por lo que la Conselleria de Cultura tiene la obligación, como propietaria, de velar por que nada afecta a su correcta conservación. Este inmueble estaba anteriormente en manos privadas, pero se acabó vendiendo a la Generalitat.
