El edificio del Mercado Central de Elche ha sufrido esta tarde desprendimientos, lo que ha obligado a intervenir a los bomberos tras ser avisados por efectivos de la Policía Local. Asimismo, se ha decidido vallar el entorno del inmueble para evitar riesgos

Los efectivos del Parque Comarcal han tenido conocimiento de estos hechos sobre las 16 horas. Hasta el lugar se ha trasladado un primer vehículo, donde uno de sus ocupantes ha sido informado por dos agentes locales sobre la caída de una pequeña pieza de teja, así como de una raja, en ambos casos en el voladizo que sobresale a media altura del edificio.

Al encontrarse a varios metros de altura, ha sido necesario que se trasladara un vehículo con escalera, donde seis bomberos han empezado a verificar la consistencia del tejado que sobresale.

En una de las esquinas, cerca de los restos arqueológicos y en el vértice más próximo al Ayuntamiento, los efectivos han saneado la parte inferior del voladizo, del que se han desprendido varios cascotes y elementos, así como parte de la pintura. Los trabajos tienen como fin que nadie resulte herido por la caída de cascotes.

Los bomberos, junto con funcionarios municipales, había realizado previamente una inspección ocular para determinar si es factible que se desprendan nuevos elementos de este voladizo.

De hecho, en el voladizo de la plaza de las Flores, en la zona izquierda, es visible una grieta, aunque bien podría estar ahí desde hace tiempo.

En el lugar se ha presentado también el concejal de Mercados, Carlos Sánchez, quien se ha interesado por la situación. Al tiempo que los bomberos trabajaban en el saneamiento de esta cornisa el edil era informado por los agentes locales de que habían recibido un aviso de que había habido ligeros desprendimientos al firme. En ese momento se le ha informado que se iba a vallar el edificio. En principio se ha pensado en hacer un perímetro de seguridad en uno de los lados, pero finalmente el mercado ha sido vallado prácticamente al completo.

Técnicos del Ayuntamiento de Elche estaban estudiando las medidas a adoptar en las próximas horas, aunque de momento se descarta que se vayan a cerrar los accesos al Mercado Central, donde continúan una decena de placeros.

Un empresario de la zona, contrario a que desaparezca el actual inmueble de abastos, también ha mostrado su malestar directamente al concejal de Mercados por la situación en que se encuentra el inmueble y ha culpado al equipo de gobierno.

Estos desprendimientos se producen pocos días después de que Patrimonio considere que los restos arqueológicos hallados en el subsuelo del Mercado Central tengan un gran valor. Ante ello, se podrán realizar las catas exteriores y, a la vez, se va a proceder al desalojo de los vendedores que aún continúan su actividad en el interior. Una vez que reciban la notificación oficial los placeros tendrán diez días para desalojar.