El segundo aniversario desde el cambio de color del Ayuntamiento ilicitano no llega en el mejor momento para el Partido Popular. La principal formación sentada en el banquillo de la oposición ha llegado al ecuador del mandato con una fractura visible. Lejos de admitir que esa división interna influye en el día a día de los populares, Mercedes Alonso defiende que están realizando una oposición constructiva y fiscalizadora al Ejecutivo local. Eso sí, también tiene la vista puesta en la asamblea del 5 de julio, en la que se elegirá al presidente del PP local. Algo que en los últimos días ha evidenciado la escisión entre dos bandos dentro del grupo municipal. Pese a los apoyos públicos que recibió Pablo Ruz hace una semana, tanto de ediles del PP de la actual Corporación como de otras pasadas, la portavoz popular defiende que sigue teniendo el apoyo de la militancia y aboga por una regeneración del partido y no por una «recolocación».

La división de opiniones en el seno del PP está siendo evidente, ¿está pasando factura a la oposición que están haciendo al Gobierno municipal?

No, la oposición que estamos haciendo desde el grupo municipal del PP es constructiva, aportando iniciativas y sugerencias, pero, al mismo tiempo, denunciando y fiscalizando al equipo de gobierno. En el día a día están Erica Sánchez y Vicente Granero, con la coordinación que corresponde y en la que yo estoy también. Los que tienen algo más de tiempo le dedican más tiempo y los que tienen menos dedican menos.

En los últimos meses se está viendo un acercamiento hacia Cristina Martínez, cuando hace unos años dejó a su equipo en minoría, ¿qué ha pasado?

Sacamos adelante mociones que presentamos con los votos de Ciudadanos e Ilicitanos por Elche. En algunas coinciden y otras no. Más que acercamientos entre grupos políticos se trata de reivindicaciones y reclamaciones para la ciudad de Elche.

¿Descarta la moción de censura a dos años de que acabe el mandato?

Nosotros nos planteamos trabajar por y para los ciudadanos de Elche y no nos planteamos más. Nosotros fuimos el partido que ganó las pasadas elecciones municipales. Somos el grupo mayoritario, pero actualmente hay un tripartito en minoría que está gobernando... Bueno desgobernando, porque está paralizada la ciudad.

¿Qué es lo mejor que ha hecho el tripartito en lo que lleva de mandato?

Me hace una pregunta difícil. En los temas importantes no ha hecho nada. Tenemos paralizado el Mercado Central, han tirado la toalla en el hotel de Arenales, del tema del alcantarillado de Peña Las Águilas no sabemos nada y en el barrio San Antón debería estar haciéndose el segundo y el tercer edificio porque el Plan de Vivienda acaba este año y no se ha avanzado. También estamos viendo cómo tienen abandonada la ladera del Vinalopó, al igual que muchos parques y jardines, la Ruta del Palmeral... En el socorrismo de las playas hemos tenido problemas cuando nunca los ha habido y en la contrata de limpieza de los colegios... En definitiva, hay muchas cuestiones sin resolver. Hablan mucho de diálogo y consenso, pero hemos visto que nada. Mire lo que ha ocurrido con la Corredora, que, a pesar de las 2.500 firmas en contra, no quieren escuchar a la ciudadanía o el tema de las terrazas...

Iba a preguntarle ahora por lo peor que han hecho...

Creo que le he dado buenos ejemplos y temas muy importantes. Estamos hablando de reactivación de la ciudad, de las pedanías y del litoral... Por lo menos, se ha conseguido en la segunda fase 15 millones de euros de ayudas europeas para la ciudad de Elche, que incluye, además, otros 15 millones que tendrá que poner el Ayuntamiento de Elche, pero tampoco sabemos qué proyectos van a ser ni nada, porque hablan de Medio Ambiente y tal, pero tampoco concretan ni nada.

La parálisis a la hora de hacer oposición es una de las críticas que también lanzan desde algunos sectores al PP...

Ya le he dicho todo lo que estamos proponiendo, pero esa es otra, uno propone, pero luego no lo cumplen. En los últimos plenos ya no vienen los ciudadanos ni a hacer preguntas. Si venían, preguntaban y se iban con dos problemas. Pero nosotros estamos proponiendo cuestiones como en el tema de La Marina, que hemos escuchado a los vecinos, proponiendo las peticiones de la pedanía y luego llegamos al pleno y no se ejecutan esas alegaciones.

¿Hacia dónde irá la oposición del Partido Popular en estos dos años que quedan de mandato?

A reivindicar mejoras para la ciudad de Elche y lo que realmente importa a la ciudadanía, y eso lo estamos haciendo desde el minuto uno. Nosotros ya hemos sido gobierno y sabemos cuáles son los intereses de los ciudadanos y qué es lo que demandan y los proyectos que se quedaron por hacer y que no se han concluido. Por lo tanto, vamos a hacer una oposición constructiva, como se ha hecho hasta ahora, votaremos que sí en lo que sea bueno para la ciudad y respecto a lo que no están haciendo y lo que tienen paralizado seguiremos reclamándolo.

Hace unos meses fue a Madrid asumiendo el liderazgo para pedir a Costas que agilizara la resolución del hotel de Arenales, dijo que en dos meses habría respuesta, y todo sigue igual. ¿Qué quedó de ese compromiso?

Fui porque me lo pidieron los afectados. Efectivamente, eso es trabajar y los ciudadanos quieren a políticos que les gestionen, lo que no está haciendo este tripartito. Es para estar en Madrid no una sino 300 veces si es necesario y eso es lo que hacíamos nosotros. El tripartito fue a interesarse cómo estaba el hotel a Madrid y luego si te visto no me acuerdo. Este tripartito ha abandonado a Arenales del Sol como a La Marina. Si hubiera sido la alcaldesa de esta ciudad el hotel estaría haciéndose.

Sin embargo, todavía no hay resolución...

Lo que yo hice fue lo que debería haber hecho el tripartito, poner encima de la mesa la importancia que tenía la construcción del hotel. También senté en la misma mesa al Ministerio y a los técnicos de la propiedad. Eso es lo que tenía que haber hecho el tripartito y haber seguido en esa línea. Cosa que no ha hecho. No se han reunido con el Ministerio y con la propiedad, es que no han estado trabajando al respecto, no se han reunido con los técnicos. Ya no es la oposición la que lo tiene que hacer, sino el equipo de gobierno.

Después de los últimos acontecimientos, ¿considera que el grupo municipal del PP está roto?

En el grupo municipal el trabajo debe ser la labor que nos corresponde que es la de oposición al equipo de gobierno, el fiscalizar y el hacer propuestas y eso no está sufriendo ninguna modificación. Eso se debe a que el grueso lo llevábamos los mismos que lo estamos llevando. Y en cuanto a las comisiones, cada uno va a las que les corresponde. No hay ningún problema.

¿Se siente traicionada por Pablo Ruz y por los concejales del PP del anterior mandato y del actual que dan su apoyo al nuevo candidato a la presidencia del PP local?

Cada uno tiene unas aspiraciones y sus motivos, y es legítimo. Cada uno en su momento decide dónde quiere estar.

¿Qué posibilidades se ve de ganar la asamblea?

Unas primarias es lo más democrático, yo ya me presenté en el año 2012 a unas elecciones en las que también hubo otra candidata y con total normalidad. Los militantes, que son los que votan, deciden quién es la mejor persona para desarrollar el proyecto del partido. Ahora bien, está claro y así lo ha dicho el presidente provincial, lo que vamos a elegir el 5 de julio es al presidente del PP, para nada tiene que ver con quién vaya a ser el candidato a la alcaldía en el año 2019, que eso corresponde a otros ámbitos. En este caso, la última palabra la tiene la dirección nacional. Hay gente que puede apoyar a uno u otro, pero si no son militantes no tienen el voto. Y una cosa son elecciones del partido y otras son elecciones a la alcaldía en las que vota todo el pueblo, que como digo no tiene nada que ver y no hay que vincular.

¿Y qué posibilidades le ve al resto de contrincantes?

Todas. Todos tenemos las mismas posibilidades. Yo tengo desde luego el apoyo de la militancia porque así me lo dieron en su día para la alcaldía. En 2007 empatamos con el PSOE, en 2011 ganamos por mayoría absoluta y me presentaba yo a ambas. Y en 2015, ganamos también pero sin mayoría absoluta. Y me presenté en 2012 a unas elecciones de presidenta local y las gané. Ahora yo creo que tengo muchísimas posibilidades porque así me lo hace llegar la militancia.

¿Qué propone para el partido?

Ya hemos hecho la convocatoria para que el 5 de julio, de seis a nueve de la tarde, en la sede del partido, puedan votar todos los afiliados que reúnan la condición de militantes. Yo propongo regeneración, porque yo sí que conté con todo el mundo. Para mí es igual de importante el militante más antiguo del partido que el que acaba de afiliarse al partido. Aquí se trata de sumar, nunca de restar, y en positivo. Nada de gente tóxica y de intereses personales y particulares. Intereses generales y el partido. Representar los valores y principios de este partido y, desde luego, gestionar. Queremos personas que sean capaces de gestionar. Hay que gestionar un partido, lo estamos viendo con la ineficacia del tripartito. Cuando estábamos en el gobierno del Partido Popular, lo que hemos demostrado, y eso la gente lo ha visto, es que somos gestores.

¿A qué se refiere?

Yo abrí el partido y la directiva que iba conmigo a la ciudadanía, cualquier persona de cualquier barrio, de cualquier pedanía ha podido participar en las mesas sectoriales que conformamos. Y ahí iban los concejales e iba gente de barrios y pedanías. Lo que nosotros tenemos es ilusión, fuerza, ganas de trabajar y de seguir desarrollando un proyecto que empezó en 2007, que lo plasmamos en la ciudad en 2011 y que ha quedado inacabado.

¿Tiene previsto celebrar algún acto de presentación de candidatura como ha hecho Ruz?

No hay que confundir un acto para una campaña a la alcaldía o para la gente en su totalidad. Eso es una cosa. Pero la asamblea va destinada a los afiliados, a la gente que puede votar, a los que son los militantes del partido. En estos cuatro años hemos estado haciendo reuniones con los militantes, claro que sí. Pero abrirlo a la ciudadanía en general, eso se hace en unas elecciones, en las municipales, en las autonómicas, europeas...

Ha dicho que propone regeneración para el partido y, por otro lado, Pablo Ruz abandera un discurso de la renovación, ¿qué es lo que hace falta?

Si me habla de otros candidatos, yo creo que renovación no hay mucha porque es gente de antes y gente que ya está, y que ha estado en esta directiva con puestos relevantes que podría haber aprovechado para trabajar en el partido. Cuando hablo de regeneración, hablo de caras nuevas, de gente nueva. Eso de decir quítate tú que me pongo yo para que luego vuelvan los mismos eso yo no lo entiendo como regeneración, sino como recolocación. Cuando yo hice la lista hubo gente en el partido, que a lo mejor ahora está en este otro proyecto, que me recriminaba haber contado con gente dispar, con gente independiente. En 2007 auné al partido y diferentes sensibilidades, cuando fui a hacer las listas era gente que había estado incluso en otros partidos y que ahora las veo en las fotos. A todos cuando se les mete en una lista se les dan las mismas oportunidades, unos las aprovechan y trabajan y otros las desaprovechan. No es que quites a nadie, sino que ellos se quedan fuera, se autoexcluyen.

¿Qué pasará si gana el próximo 5 de julio?

Trabajar. He estado trabajando, en la oposición trabajando, en el gobierno trabajando y sigo trabajando en la oposición. No me he ido a ningún sitio.

¿Y si pierde?

Seguiré estando en el partido trabajando y aportando en el partido como he hecho siempre.

¿Cree que la provincial está más del lado de Pablo Ruz que de usted?

No, el presidente provincial me ha puesto en su equipo como secretaria ejecutiva de Mujer, Igualdad y Juventud. Yo soy miembro nato y, en cambio, me ha puesto en su directiva. Yo creo que eso es un espaldarazo y una apuesta en mi trabajo y mi persona.

En 2012 la Udef cuestionó la asamblea por el destino de las cuotas...

No, no. Fue una persona independiente del partido, de fuera. Lo investigaron y se archivó. Se ha dicho que no hay nada al respecto. Ya está bien de gente que se dedica a falsear y mentir.