Nueve escolares de una clase de cuarto de Primaria del colegio Hispanidad de Santa Pola resultaban heridos de diversa consideración en enero de 2013, después de que el suelo del aula se hundiera. Habían pasado unos minutos desde el inicio de la clase y, de repente, los pequeños se precipitaron por un socavón de más de un metro y medio de profundidad. Ahora, cuatro años después, la Policía Nacional ha detenido a tres personas y, en concreto, a la entonces edil de Urbanismo, Lola Gadea; a la arquitecta municipal y a otra arquitecta externa que, al parecer, hizo los estudios técnicos. No obstante, tras haber declarado, las tres han quedado en libertad con cargos. La investigación se lleva desde el juzgado de Instrucción número 3 de Elche.

Tanto a la edil del PP -entonces responsable municipal de Urbanismo y hoy en la oposición- como a la técnica municipal se les investiga por un delito contra los trabajadores y delito de lesiones por imprudencia grave. Mientras, a una segunda arquitecta, contratada externamente y que fue la encargada de hacer los estudios de los colegios, se le investiga por un delito de falsedad documental.

Las detenciones, dirigidas por la Unidad contra la Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de Alicante, se practicaron a finales de la semana pasada, y, tras su declaración, las tres quedaron en libertad con cargos.

Los hechos tuvieron lugar el 11 de enero de 2013, cuando sobre las 9.10 horas, nada más comenzada la jornada escolar, el suelo de la clase cedió, y diez de los 19 alumnos que había en ese momento cayeron al socavón. Fueron las mesas y sillas que se encontraban junto a la ventana, y, por tanto, sus ocupantes, los que acabaron precipitándose después de que cediera el forjado sanitario. La profesora, además, tuvo que recibir asistencia médica por su estado de nerviosismo. Los 180 alumnos del centro, poco después, eran desalojados del colegio.

La zona hundida, según calcularon los bomberos en un primer momento, era de unos 35 metros cuadrados, aunque el socavón provocó una enorme grieta en las aulas contiguas. El colegio había sido construido en los años 70. A partir de ahí, se abrió la polémica entre equipo de gobierno y oposición, por los informes técnicos previos y, en concreto, por el hecho de que podrían haber puesto de manifiesto las deficiencias del edificio.