La restauración de imaginería y pintura requiere de una paciencia y una delicadeza extraordinaria. La responsabilidad se dispara aún más cuando las obras que adecuar son imágenes clave para las procesiones de Semana Santa en Crevillent, monumentos que representan a la Semana Mayor de esta localidad en unas celebraciones declaradas como Fiesta de Interés Turístico Internacional, y cuyas piezas son reconocidas y queridas por los fieles crevillentinos.

El artista José Vicente Bonete se ha encargado de reparar ahora siete de estas imágenes, con precisión de cirujano, en el Museo de Semana Santa de Crevillent. Las piezas de El Lavatorio y La Oración en el Huerto, del artista del siglo XIX Antonio Riudavets, son las que más dificultad han presentado, al ser piezas antiguas y más delicadas. Éstas han llevado un exhaustivo trabajo para eliminar los repintados que, a lo largo de los años, se han ido añadiendo a la pintura original para cubrir desperfectos. Así, Bonete ha ido, poco a poco, sacando a la luz la pintura original que Riudavets otorgó a estos monumentos. Además, las ha retocado con color, ha hecho catas de limpieza y consolidaciones por inyección.

Bonete se ha encontrado en la reparación de El Lavatorio con una sorpresa, y es que en la imagen de San Pedro se ha descubierto la firma de Riudavets con el año y el lugar de ejecución (1874 en Orihuela), un dato desconocido.

El artista se ha encargado también de reparar otras imágenes de escultores que ya datan de después de la Guerra Civil. En esta fase restauró Las Tres Marías y San Juan, de Mariano Benlliure; el Cristo del Perdón, de Juan García Talens; Traslado al Santo Sepulcro, de Juan García Yúdez; La Santa Mujer Verónica y La Samaritana. Estas figuras requerían una intervención urgente ante el grave estado de conservación en que se encontraban, según un informe de la Federación de Cofradías y Hermandades de Semana Santa. En el caso de las piezas de Benlliure , García Talens y García Yúdez, se ha trabajado en la conservación y limpieza de las piezas, a las que también se ha reparado rasguños y golpes. Las obras, que acabaron de adecuarse el pasado viernes, ya están a resguardo de sus respectivas cofradías a punto para ser procesionadas en esta Semana Santa. Este trabajo pertenece a la segunda fase del convenio firmado por el Ayuntamiento de Crevillent y la Federación de Cofradías y Hermandades, para la restauración de las esculturas procesionales, con una aportación de 83.000 euros y que lleva a cabo por completo el restaurador José Vicente Bonete.