? La caseta instalada para la venta de las sillas con vistas a las procesiones de Semana Santa abrió ayer sus puertas con una gran avalancha de público que, desde las siete de la mañana, ya hacía cola para adquirir sus localidades pese a que las taquilla abrían a las nueve. Según la Junta Mayor, ayer se vendieron más de 7.000 sillas, casi un tercio del total que sale a la venta, agotándose prácticamente las de primera y segunda fila en la Plaça de Baix para las procesiones de Martes, Jueves y Viernes Santo.
