Hace cuatro años que Rosario Sedano sufrió un ictus cerebral que le dejó sin habla. Esta mujer, que ayer se presentó como un ejemplo de superación en Elche, lucha cada día para recuperarse y destaca que ha podido volver a comunicarse con sus tres hijos y su hermana gracias a las aplicaciones del teléfono móvil.

«El asistente de voz me ha devuelto la vida, porque no me podía expresar bien», explica a través de su teléfono móvil Rosario Sedano, quien añade que, por otro lado, «asisto a terapia con mi pedagoga, para tratar de volver a hablar. Ella me pone deberes para, poco a poco, volver a hablar».

Rosario tiene 69 años y después de cuidar durante 17 años de su marido, que también sufrió un ictus, vivió un episodio parecido. La mujer explica que «me acosté a dormir la siesta en la cama y cuando sonó el teléfono vi que no podía moverme». Desde aquel día, hace cuatro años, Rosario ha luchado por recuperarse y reconoce que uno de sus mayores obstáculos era poder comunicarse.

Primero empezó a utilizar una tablet para hablar con sus seres queridos y ahora se desenvuelve con total libertad y autonomía gracias a una aplicación que lleva en el teléfono móvil.

«Puedo llevar una vida normal. Cada día me organizo la comunicación. Me gusta mucho planificarme, y escribo las cosas antes de hacerlas», explica esta vecina de San Vicente del Raspeig, a la que el uso del asistente de voz también le sirve para estimular su cerebro y recuperar cualidades cognitivas que se vieron afectadas como consecuencia del ictus.

«Actualmente vivo sola en un chalé y sólo tengo compañía por las noches, cuando viene una amiga a dormir a mi casa, para que no esté sola», explica Rosario, que reconoce que «soy una persona muy nerviosa, y el tener que escribir antes las cosas me ayuda a no hacerlas en el momento».

Rosario Sedano señaló que «éste no es el único obstáculo al que ha tenido que hacer frente. Con cuarenta años me diagnosticaron cáncer de mama, y después de cinco años de tratamiento conseguí superarlo».