Normalidad tras el intenso día de viento que azotó ayer la provincia con rachas de hasta más de 160 kilómetros por hora. El Parque Comarcal de Bomberos de Elche tuvo que realizar más de 40 salidas por el viento, que ocasionó desprendimientos de fachadas, cornisas, antenas y árboles. Uno de los sucesos más llamativos fue la caída de una palmera sobre un vehículo que literalmente, tal y como se puede observar en la foto, lo machacó en el barrio de San Antón.