Los expertos apuntan a que la regresión de la plaga en el casco urbano se debe en buena medida al cambio de la filosofía para combatirla. En este sentido, el concejal del Palmeral, Antonio García, explicó que «hemos pasado de invertir dos millones de euros en talar palmeras, a destinar parte de esos recursos a tratar las palmeras afectas para evitar que sean taladas».

De esta forma, apuntó el edil ilicitano «se ha conseguir una regresión de la plaga, ya que antes no se actuaban contra el insecto. Se talaban las palmeras afectadas, y ya está. Los tratamientos que se llevaban a acabo antes eran anecdóticos».