La empresa concesionaria para levantar el nuevo Mercado Central, Aparcisa, ha asegurado esta mañana que no existen restos arqueológicos de suficiente valor como para paralizar el proyecto de construcción del nuevo edificio.

La firma ha señalado que las excavaciones se encuentran ya muy avanzadas, al 80%, y ha calificado de "desastre" el estado de la estructura y de los restos hallados hasta el momento.

Desde la empresa Alebus, encargada de las catas, precisaron que con la construcción del Mercado Central en 1940 y su posterior edificación en 1960 se destruyó todo el material con el que se podría haber tenido conocimiento del proceso histórico que vivió Elche desde la época islámica. Tan solo quedan restos de aljibes de los siglos XI al XVIII y silos y fosas islámicas, además de abundantes frangementos de cerámica.

Con todo ello, Aparcisa se encargará, una vez acaben las catas el próximo mes, de elaborar un estudio detallado para presentarlo al Consell, que tendrá que acreditar si los restos arqueológicos hallados tienen o no valor suficiente y si se puede continuar con el proyecto para levantar el nuevo Mercado Central y tirar abajo el actual inmueble.