Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Ignacio Urquizu: «En el PSOE ha habido un debate en el que todo el mundo podría tener razón»

El diputado por Teruel, una de las figuras pujantes dentro del partido del puño y la rosa, visitó ayer la agrupación socialista de Elche

Ignacio Urquizu: «En el PSOE ha habido un debate en el que todo el mundo podría tener razón»

El diputado por Teruel, una de las figuras pujantes dentro del partido del puño y la rosa, visitó ayer la agrupación socialista de Elche para participar en una mesa redonda titulada «La Socialdemocracia en el siglo XXI. Retos de futuro».

Recién llegado a la política, con poco más de un año de bagaje en la siempre abrasiva primera línea de fuego, Ignacio Urquizu (Teruel, 1978) ha puesto cara y voz a la cabalgante crisis de su partido tras posicionarse por la abstención a la investidura de Mariano Rajoy.

¿La crisis de la socialdemocracia es real o una simple etiqueta recurrente?

La idea de la crisis de la socialdemocracia es tan antigua como la propia socialdemocracia. No creo que esté en crisis porque lo que hace básicamente es ir adaptando su camino a los nuevos tiempos. Siempre ha sido una corriente ideológica que ha tenido que ver con igualdad, libertad, pluralidad, tolerancia? Y esos valores se han ido traduciendo en políticas en cada momento de la historia. España ha cambiado mucho, no tiene nada que ver con la de los años 80, y en ese camino algunos venimos defendiendo el hacer una serie de políticas que asuman esos nuevos retos.

¿Y cuáles son esos retos?

Yo suelo hablar de cinco. El primero es la modernización del estado del bienestar. Ya no sólo debemos preocuparnos por prestar los servicios sino por hacerlo mucho mejor que hasta ahora. El segundo tiene que ver con preparar a la gente para un economía, que debe ser más tecnificada, robotizada y digitalizada de la que tenemos ahora. El tercero pasa por mejorar nuestra democracia, y otro reto se llama Europa; debemos ser conscientes que Europa tiene un problema de desafección y de proyecto. Finalmente, como sociedad, también debemos avanzar en las políticas de igualdad porque todavía la mitad de la sociedad sigue teniendo menos derechos que la otra.

¿Es viable el estado del bienestar tal y como lo conocemos?

Lo primero es garantizar los ingresos. Para poder gastar tienes que ingresar, y eso nos debe llevar a una reflexión sobre la fiscalidad. El problema en España es de desigualdad horizontal, gente que con el mismo nivel de renta, en función de cómo la consiga, paga más o paga menos. Una vez se garantizan los ingresos hay que mirar hacia la demografía, porque al final el estado del bienestar no es más que un pacto intergeneracional entre aquellos que trabajan ahora, que financien el bienestar de los que trabajaron en el pasado, con los que trabajarán en el futuro. Si la demografía en un momento se viene abajo y falla tenemos que estar preparados para ello.

¿Teme que Podemos acabe adueñándose de la bandera de la izquierda en nuestro país?

Para coger una bandera de izquierdas hay que ser de izquierdas. Y lo que yo no sé muy bien es lo que son, porque en su corta vida han sido socialdemócratas, comunistas, no han sido de derechas ni de izquierdas? Podemos tiene un problema muy serio de definición ideológica. Es un partido que nace de la desafección, que compartimos y comprendemos muchísima gente, pero creo que, más allá de eso, le falta mucho para definir su proyecto político.

¿Al final ha sido peor el multipartidismo que el bipartidismo?

No hay ningún sistema de partidos perfecto. El de ahora es más representativo, pero tiene el problema que la gobernabilidad implica el entenderse con gente que no piensa como tú.

¿Cómo bajan las aguas por Ferraz tras el maremoto del último congreso federal?

Después de estos meses convulsos de debate apasionados estamos caminando hacia la resolución de nuestros problemas. Y el principal problema es que el partido socialista no es capaz de ganar elecciones al peor Gobierno que ha tenido nuestra democracia hasta el día de hoy.

¿Cree que se ha gestionado bien la crisis del partido?

Seguramente habremos hecho alguna cosa mal para que haya gente enfadada, pero, dicho eso, el debate al que nos enfrentábamos era un debate en el que seguramente todo el mundo tenía razón.

Muchos le sitúan ya en la mesa de dirección del PSOE...

Sólo llevo un año en política y soy una persona muy prudente. Soy diputado porque los militantes de Teruel quisieron que fuera diputado, no porque yo me propusiera. En ese sentido, si en el partido quieren que esté en la dirección, estaré en la dirección.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats