El artista ilicitano Juan Llorens encomienda a una fuerza casi mística el cuidado de las cerca de 200 piezas de arte urbano que decoran más de 2.700 metros del cauce del río Vinalopó y que conforman el proyecto Víbora, en el que en el año 1991 y en 2014 se dieron cita multitud de exponentes de esta disciplina artista de diferentes partes del mundo. Llorens explica que el último temporal, en el que se elevó un metro el nivel del río, ayudó a que se limpiara este trayecto de grafitis tanto de polvo como de otro de sus grandes enemigos: las cacas de perro. «Las fuertes lluvias fueron un regalo de los dioses. Solo hay que ver lo vivos que han de dejado los colores de las obras. Parece que fueron pintadas hace un mes», reseña el promotor de la iniciativa.

Este canal urbano, a pesar del gran valor que tiene para muchos amantes del grafiti -hay artistas importantes que se desplazan a Elche en verano solo para contemplarlo-, es bastante utilizado pro propietarios de canes para pasear y que estos hagan sus necesidades. El problema, según Juan Llorens, es que las papeleras se encuentran justo en la zona de tierra de la ladera, y a mucha gente le da pereza acceder a esta zona, a través de las escaleritas, y depositar allí la bolsita con los excrementos de su mascota. «Aquí la solución pasa por que se conciencie más la gente. Que tenga más respeto por algo de tanto valor para la ciudad, aunque los artistas poco podemos hacer », aclara.

Al respecto, el concejal de Limpieza, Héctor Díez, comparte que es una problemática a la que solo se le puede dar respuesta con un aumento del civismo de los dueños de los perros. «El cauce es un área que depende de la Confederación Hidrográfica y el Ayuntamiento no tiene competencias para colocar papeleras... Además de que no es recomendable, ya que, aparte de ser en un área de esparcimiento, cumple la función de canalizar el agua en caso de riada», indica el edil, que apostilla que el Consistorio instaló en octubre 20 papeleras nuevas en las zonas de arena, aunque eso no parece estar menguando el problema. «Lo que sí hacemos desde el Ayuntamiento es limpiarlo con una barredora, una vez al mes, aunque no sea de nuestra competencia», dice.

Dejando este maloliente problema de lado, la degradación que padecen las creaciones que componen el proyecto Víbora a causa de la meteorología o de la erosión del terreno son para Juan Llorens parte del encanto de esta kilométrica obra colectiva. «Que haya desconchados en varias de las piezas les aportan un halo de misterio, como ocurre cuando ves una pintura de los antiguos griegos en un museo. Es parte de la esencia del arte efímero, que se vaya deteriorando, que conviva con el paso del tiempo, hasta que llegue el momento de que vengan otros artistas y pinten encima obras nuevas. Eso es algo que ocurrirá en el año 2020», detalla Llorens.

El proyecto Víbora arrancó en 1991 colocando una primera concatenación de pinturas en la ladera en el libro de los récords Guinness. En el verano de 2014 se repitió la experiencia y se decoraron174 parcelas, con brochas, rodillos, pinceles, sprays... En total, se repartieron más de diez toneladas de pintura, que dispuso en su momento el Ayuntamiento. «Sobre todo lo promovió el colectivo de los Pornostar, entre los que hay varios artistas urbanos ilicitanos, y consiguieron reunir a cientos de creadores tanto de España como de diferentes partes de Europa. A muchos de ellos les continúo enviado fotos para que vean cómo evolucionan sus murales », detalla Llorens.

Un informe para evitar críticas

El promotor de Víbora, Juan Llorens, reseñó ayer a este diario que pretende reunirse con especialistas de la Universidad Miguel Hernández para que analicen la calidad del agua en el río Vinalopó en todo el recorrido que cubren estos murales horizontales «Quiero demostrar, desde un punto de vista científico, que esta actividad no perjudica al agua. En 2014, antes de la segunda edición, algunos grupos ecologistas denunciaron que perjudicábamos el agua con la pintura y que eso afectaba la calidad del caudal que llegaba a El Hondo y al mújol», explicó.