Mucho más que un juguete de usar y tirar. El Ayuntamiento de Elche ha lanzado una campaña de concienciación contra el abandono animal coincidiendo con la época del año en la que se regalan más animales de compañía, una práctica habitual que los convierte en las estrellas de la casa en Navidad y que dispara el índice de abandonos en los tres primeros meses del año.

Elche no escapa a una lacra que salpica casi por igual a todo el territorio nacional. Según los datos que maneja la Fundación Affinity, en España se abandonaron más de 100.000 perros y 33. 000 gatos en 2015. En Elche, aunque los datos que maneja la Concejalía de Medio Ambiente son estimativos, fueron más de 600. Dos perros abandonados de media cada que o bien acaban en la calle o en alguna perrera o sociedad protectora de animales. Un tercio de estos abandonos coincide con el punto y final de las fiestas navideñas. ¿Casualidad?

«En Reyes es cuando más animales se regalan y después de estas fechas hay un alto índice de abandono», alertó ayer Antonio García, edil de Medio Ambiente, acompañado por Teresa Pomares, representante de la Sociedad Protectora de Animales y Plantas Baix Vinalopó. Sólo en la perrera de Bacarot se recogen unos 500 perros al año abandonados en Elche, de los que un 10% son sacrificados por cuestiones de salud y de espacio. Otro 14% permanece en la perrera o se deriva a una protectora, mientras que un 44% acaba siendo adoptado.

Las causas principales por las que los dueños acaban abandonando a sus perros vienen derivadas de su comportamiento (15%), por el hecho de tener una camada no deseada (15%), por factores económicos (12%) o por un cambio de hogar (9%). Ante este diagnóstico, desde la Sociedad Protectora de Animales y Plantas Baix Vinalopó consideran «muy importante» generar la conciencia, sobre todo en esta época del año, de que los animales, además de un amigo, «son una responsabilidad».

Teresa Pomares alerta de que, entre enero y marzo, «tenemos un boom de abandonos que nos supera», aunque también se producen muchas más adopciones de lo normal. Sin embargo, pasada la fiebre navideña, muchos acaban de vuelta en la Protectora.

Una ecuación maquiavélica

Los niños de hoy se cansan antes de los juguetes y cada vez se regalan más animales en su lugar. Bajo esa ecuación maquiavélica, la productora encargada del spot ha intentando reflejar la realidad que estos días se vive en muchas familias. «Los perros en Navidad suelen ser el centro de atención y los mimos, el juguete estrella, pero luego muchos acaban abandonados», asegura uno de los responsables del spot, grabado íntegramente en Elche y con perros que fueron abandonados y adoptados con posterioridad.