Una mandarina gourmet. El Camp d'Elx, la Vega Baja y otras zonas alicantinas se han sumado este año al conjunto de provincias españolas que han decidido apostar por la producción de la variedad de mandarina «Orri», un cítrico de origen israelí que pasa por ser el más rentable del mercado dentro de las mandarinas y que también se cultiva en el municipio ilicitano. Los productores de la provincia han logrado recoger cerca de 2.300 toneladas, un 9% del total nacional que se concentra en Huelva, Murcia y Valencia. Se trata de una variedad protegida con un cultivo limitado que le da aún más valor

Los agricultores españoles han logrado comercializar este año, en su primera campaña tras el amplio proceso de regularización pública llevada a cabo por The Enforcement Organization (licenciatario máster de la variedad en España y Portugal), un total de 25.000 toneladas y calculan llegar a 33.000 toneladas para todo el conjunto de 2017 una vez empieza la recolección el próximo febrero, según explicó ayer Vicente Pascual, ingeniero técnico agrícola y vicepresidente de Asovav.

Cerca del 29% de las mandarinas se produce en la provincia de Huelva, un 27% en Valencia, un 14% a la de Murcia, el 10% en Castellón, un 9% en Alicante, un 6% a la de Almería y casi un 5% a la de Sevilla. En Alicante existen ahora mismo en explotación unos 50.000 árboles que dan un fruto que de destina básicamente a la exportación a mercados europeos potentes de Europa como Alemania, Austria o Francia donde por cada mandarina se llega a pagar un euro. Otra de las prestaciones de esta mandarina de origen israelí es que sólo la pueden comercializar en la UE los agricultores españoles.

Los datos de comercialización durante esta primera campaña sitúan a la variedad «Orri» como la mandarina con mejor retorno económico del mercado, al alcanzar un precio de venta en campo de 0,8 a 1,2 euros el kilo. Las características de esta mandarina tardía y la filosofía empresarial de oferta controlada han permitido situar a Orri en el segmento premium de las frutas, con precios récord tanto en origen como en destino (3,6 euros el kilo de precio medio de venta al público). En algunas cuidades de Alemania, Austria y Francia se han llegado a encontrar unidades a un euro. Estas cifras la consolidan como el cítrico protegido «estrella» del mercado europeo, con cotizaciones que confirman su rentabilidad para todos los eslabones de la cadena. La producción ha generado, de hecho, un volumen de negocio cercano a los 94 millones de euros que, cuando los árboles entren en plena producción se podría elevarse hasta los 240 millones de euros. La «Orri» es una mandarina de origen israelí doblemente protegida tanto por las autoridades españolas como por la Comisión Europea que fue desarrollada por el Instituto Volcani Center (Israel). Entre las características de este híbrido tardío destaca su facilidad de pelado y su prácticamente nulo contenido en semillas (pepitas).