Más de 300.000 personas en la provincia de Alicante no pueden permitirse mantener su casa a una temperatura adecuada, según la última oleada de la Encuesta de Condiciones de Vida que elabora el INE. Es la denominada pobreza energética y se deja sentir con especial intensidad en la Comunidad Valenciana, la tercera -sólo superada por las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla- con mayor número de personas afectadas por esta situación (16,3% de la población).

El Gobierno y el PSOE firmaron ayer un acuerdo para reformar de forma urgente la ley del sector y prohibir que se pueda cortar la luz a los hogares «extremadamente vulnerables», a la vez que han cerrado un nuevo modelo de financiación para el bono social.

En Elche, las luces de Navidad se apagaron ayer durante una hora en el centro de Elche en señal de protesta por la pobreza energética, una problemática que afecta a millones de personas que no tienen acceso a la luz, el agua o el gas. Entre las 19.30 y las 20.30 horas, el Consistorio desconectó el alumbrado entre en la Plaça de Baix, la Corredora y la Glorieta, tras una providencia dictada por el alcalde, Carlos González.

Al mismo tiempo, partidos políticos, como PSOE, Compromís y Podemos, colectivos sociales y sindicatos se concentraron frente al Ayuntamiento para reclamar la paralización de los cortes de suministro que se realiza a las familias por no poder pagar los recibos. En esta línea, la concentración sirvió para reivindicar una tarifa social para vecinos con escasos niveles de renta.

Durante la protesta, tampoco faltaron las denuncias hacia las compañías eléctricas por haber subido la luz en los últimos años. Una carga que se ha convertido en «asfixiante» para muchas familias. Los asistentes también criticaron a las muertes producidas en España por la falta de luz. «Llega el invierno y no podemos consentir que familias sin recursos se queden sin calefacción», señalaba una de las pancartas que formaron parte de la estampa reivindicativa. Así, «a oscuras» numerosas ciudades, al igual que Elche, dijeron no a este problema social con el que en público se denunció la pobreza energética.