El Ayuntamiento de Elche va a intentar rescatar un proyecto que lleva prácticamente dos décadas en el olvido y que beneficiaría claramente a los vecinos de la pedanía de Torrellano en su calidad de vida y al tráfico en general, pero seguramente no en su economía local.
En concreto, se trata de intentar que vuelva a la vida una vieja iniciativa como es la de crear una carretera alternativa que permita suprimir buena parte de los vehículos que históricamente tienen que atravesar Torrellano en sus comunicaciones entre Alicante, Elche, la Institución Ferial Alicantina o Elche Parque Empresarial.
La propuesta consiste en generar una rotonda, glorieta o similar para la distribución del tráfico una vez pasado el mencionado polígono industrial y antes de entrar en el núcleo urbano de Torrellano. Desde ahí, se acometería una nueva carretera que conectaría la Nacional 340, que es la que divide a Torrellano, con la Vía Parque.
Este vial ya estaba contemplado en el Plan General de Ordenación Urbana de Elche del año 1998, pero nunca se llevó a término y con la llegada de la crisis se enterró aún más.
Ahora, el equipo de gobierno lo tiene en mente, pero no a corto plazo, en todo caso a medio, a la vez que desde el Consistorio se aclara que «su impulso le corresponde a la Generalitat».
De hecho, según fuentes municipales, la iniciativa estaba consensuada con el Consell, pero llegó el Gobierno autonómico del PP y se ha paralizado durante prácticamente 20 años.
Dudoso refrendo
No obstante, la idea de resucitar este proyecto no levanta demasiado entusiasmo precisamente en esta partida rural. La presidenta de la Unión de Asociaciones de Torrellano, María Ángeles Llorens, reconoce que se propuso hace mucho tiempo, pero que en principio los vecinos lo han rechazado cada vez que ha surgido la posibilidad. «No vamos a echar piedras sobre nuestro mismo tejado. Tiene más contras que a favor», expone esta representante, para explicar a renglón seguido que buena parte de los comercios, tiendas bares y restaurantes viven de los ocupantes de los vehículos que cruzan esta pedanía.
«Cuando te compras un piso sabes dónde lo haces y la carretera está ahí desde antes, desde hace mucho tiempo», recuerda Llorens, quien a su vez insiste en que quien no quiera entrar por la carretera nacional tiene la Vía Parque como alternativa.
La presidenta de las asociaciones de Torrellano, que agrupa a más de una veintena de entidades de todo tipo, también manifiesta que en un futuro pueden haber otras opciones, como por ejemplo el vial que nace de la Institución Ferial Alicantina (IFA) «y que no se ha terminado por falta de dinero».
El presidente de la asociación de vecinos (que está integrada como tal en la Unión de Asociaciones de Torrellano), Jerónimo Bretones, rememora todas las infraestructuras que se han venido sopesando desde hace lustros y que iban a afectar directamente o indirectamente a Torrellano. Así por ejemplo, recuerda cómo en la última legislatura del PSOE al frente del Gobierno central se redactó el proyecto para enlazar IFA, el aeropuerto, la autovía y la Vía Parque. Pero además, también se descartó soterrar el paso a nivel de Torrellano y apostar en su lugar por un «paso atrincherado», de manera que los vehículos salvarían la vía por un paso elevado, mientras se acometía una infraestructura similar a la que tiene Villena para su parada de AVE. «Incluso estaba previsto que el tranvía de Alicante-Elche pasara por Torrellano», indica Bretones.
«Municipalizar» la N-340
El portavoz de esta asociación indica por otro lado que en el actual mandato del tripartito se ha pedido al alcalde que el Ayuntamiento trate de recuperar también otro viejo anhelo, como es que parte de la N-340 pase a ser de titularidad municipal, para así instalar algún que otro semáforo y hacer una rotonda a la altura del instituto de la pedanía.
En este punto, el alcalde, Carlos González, señala que sí están por la labor de «municipalizar» un tramo de la N-340, unos siete u ocho kilómetros, pero siempre que haya una contraprestación por parte del Ministerio de Fomento, en el sentido de apoyo económico para su conservación y mantenimiento. En este punto precisa que incluso estaba todo acordado con el Ministerio de Fomento para hacer ese cambio de titularidad, pero que desde hace unos seis años nada se ha movido al respecto. «Retomaremos esa titularidad, pero nos tienen que ayudar, al menos en un periodo de transición. Eso nos permitiría tomar decisiones en este vial sin tener que pedir autorizaciones». agrega el primer edil.
En cualquier caso, Jerónimo Bretones señala que recuperar ese vial de circunvalación «nos parece bien y nos parece mal. Es una tranquilidad para la pedanía, menos ruido y menos peligros. Pero muchos negocios viven de la gente que pasa y para y se perjudicaría a los vecinos del pueblo».
El representante vecinal pone como ejemplo lo que ocurrió cuando el grueso del tráfico de la costa dejó de pasar por El Altet al acometerse el desvío de la carretera nacional.
