Mercedes Alonso parece que vuelva a ser la alcaldesa de Elche. El martes, en la reunión en Madrid con responsables de la Dirección General de Costas, la edil popular acompañó a los representantes del hotel de Arenales con el fin de intentar contribuir a que deje de estar paralizada la obra y se agilice el expediente administrativo. Tomó la palabra al final de la reunión, entre otras cosas, para intentar convencer al Ministerio de Medio Ambiente de la importancia de resolver de manera urgente esta cuestión. La pregunta es: ¿en calidad de qué participó ella en la reunión?

Algunas voces apuntan que la exprimera edil se ha apuntado a todas luces un tanto, dejando así en cierta medida en evidencia al tripartito que gobierna Elche.

La también diputada provincial aseguraba ayer que la empresa fue la que se dirigió al grupo municipal del PP en busca de apoyo. «Nos pidieron que les ayudáramos porque se estaban dando contra un muro en el Ayuntamiento: no les hacían caso», aseguraba ayer.

Es significativo que el principal partido de la oposición a nivel local haya conseguido ser recibido en audiencia en Madrid -aunque sea por un Gobierno de su mismo color político- llevando de la mano a la empresa Princesol. Lo lógico es que la delegación la hubiera encabezado el Gobierno local. El PP insiste en que la empresa llevaba tiempo queriendo reunirse en Madrid, pero que el tripartito no lo había logrado.

Desde su núcleo más cercano, opinan que esta jugada también ha servido a Alonso para reafirmarse dentro y fuera de su propio partido, justo en un momento en el que todo apunta a que tendrá que batallar frente a Pablo Ruz para seguir llevando el timón del PP local.

La veteranía es un grado y Alonso es una superviviente. De nuevo ha movido ficha y deja así totalmente claro que no solo se le atribuye que comenzaran las obras de rehabilitación del hotel, tras décadas de bloqueo, sino que, ahora, sin responsabilidad en el Ejecutivo local, parece que siga llevando la voz cantante, al menos en este asunto.

Lo cierto es que vecinos de Arenales siguen sin comprender cómo cuando gobernaba el PP a nivel local el proyecto iba adelante, y con el nuevo tripartito, la situación ha vuelto a sus orígenes de parálisis.

Desde el equipo de gobierno se recuerda y una y otra vez que ha sido Costas la que ha paralizado las obras -y por tanto el Gobierno del PP-, y, además a raíz de una denuncia de una asociación y de un particular que, a su vez, es un conocido funcionario municipal. Es decir, no fue el Ayuntamiento el que provocó toda esta situación inicialmente. Pero este es un mensaje que no termina de calar, ni entre los que están a favor ni en contra del proyecto, ya que los ilicitanos no quieren saber de cuestiones administrativas, burocráticas o políticas, sino de hechos y realidades. Y la realidad es que el hotel sigue hecho una ruina.

Alonso no perdió la ocasión ayer para volver a recordar que uno de los integrantes del tripartito, Compromís, no quiere este tipo de negocios junto a la playa y que prefería que se hubiera permutado por otro suelo. En definitiva, volvía a la carga con que el Ejecutivo local no está trabajando por Elche y que hay discrepancias en asuntos fundamentales como éste o el Mercado.

«¿Por qué no les llevó (en referencia a Princesol) el tripartito en septiembre? -fecha en que el alcalde se reunió en Madrid con Costas- ¿Por qué el Ayuntamiento no ha resuelto los dos expedientes que también tiene contra el hotel? Es la parálisis total», reflexionaba ayer Mercedes Alonso en una maniobra de la que aspira salir reforzada.