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Salud Pública revisará los menús de los colegios para corregir las deficiencias

Equipos especializados en nutrición examinarán las comidas que se sirven cada día en los centros

Salud Pública revisará los menús de los colegios para corregir las deficiencias

La Conselleria de Sanidad, a través de Salud Pública, va a examinar la calidad de los menús de los comedores escolares, con el objetivo de velar por la calidad nutricional de la comida que se sirve a los menores, que a partir de este lunes vuelven en mayor volumen a hacer uso de este servicio público. El proyecto que se va a poner en marcha lleva por nombre Programa de Evaluación y Fomento de la Calidad Nutricional de la Oferta Alimentaria en Centros Escolares 2016-2019, y que tiene como fin primordial garantizar la calidad de la oferta alimentaria de los centros escolares de la Comunidad Valenciana.

En este programa van a participar profesionales con formación en nutrición humana y dietética, inspectores sobre los que recae el control oficial de comedores escolares, así como personal instruido para tratar la información relacionada con la oferta de alimentos y bebidas.Además, se va a designar personal de servicios centrales como de centros de Salud Pública (CSP), para la evaluación de la oferta alimentaria de los menús de un mes escolar.

La labor de los expertos va a consistir en evaluar durante veinte días el menú de los comedores seleccionados, que aún no se sabe cuáles son, dando lugar a un informe de evaluación inicial, con recomendaciones en su caso, que será remitido en el plazo de un mes al centro escolar. Al curso siguiente al de la primera evaluación se realizará el seguimiento de las recomendaciones.

Tres son los principales objetivos de este nuevo programa que lidera la Consellería de Sanidad. El primero va a ser verificar la oferta alimentaria de los comedores de centros escolares de educación primaria y de educación secundaria obligatoria ubicados en la Comunidad Valenciana, incluyendo menús especiales por motivos de salud (alergias, intolerancias alimentarias, régimen) o por razones culturales o religiosas.

Velar por la oferta de frutas y verduras, especialmente de producción local y ecológica, también es otra de las prioridades del programa, así como verificar la ubicación, presentación, oferta y publicidad de alimentos y bebidas a través de máquinas expendedoras de alimentos y bebidas. Estas últimas son más frecuentes en los institutos.

Con todo ello, Salud Pública elaborará un informe que se remitirá a cada centro educativo. Además, desde la Dirección General de Salud Pública se elaborará un informe anual que será facilitado a la Conselleria de Educación, Cultura y Deportes. La directora del centro de Salud Pública de Elche, Antonia Soriano, destacó que «se trata de un programa muy importante, ya que nuestro objetivo también debe ser fomentar una buena alimentación en la infancia».

Durante este curso se estima que se va a analizar un tercio de los comedores escolares de la Comunidad Valenciana, el próximo curso otro tercio, y el siguiente el tercio restante. De esta forma, en tres años se espera haber examinado los menús que se sirven cada día en todos los colegios, y contar con conclusiones que ayuden a mejorar la dieta de los menores. Antonia Soriano valoró que «se trata de ir avanzando en la alimentación infantil. Hay que ver la forma de incluir determinados alimentos que son muy beneficiosos, como las legumbres y el pescado, en los menús de una forma que los alumnos acepten comerlos».

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