Reivindicativo y con ciertas diferencias. Así resultó ayer la sesión pública del Patronato del Misteri, marcada por la petición que lanzó un sector de los patronos para crear una escuela de música y formar a los cantores de la Escolanía. Entre un clima más agitado que de costumbre, el clásico encuentro, celebrado ayer en el salón de plenos del Ayuntamiento de Elche, sirvió para conocer las aspiraciones de varios miembros de la familia de La Festa, en cuanto al futuro inmediato de los cantores.

Y es que, la intención de mejorar la formación de las voces del Misteri, para avanzar en la calidad del drama asuncionista, fue el asunto predominante de la cita. «Los niños tienen que tener disciplina de la música, ya que las exigencias de conocimientos académicos han cambiado», resaltó la patrona Orófila Pérez, quien, además, recordó que «Antes se conocía al Misteri porque cantaban voces no profesionales, trabajadores ilicitanos que ensayaban durante todo el año para que las representaciones salieran a la perfección».

En esta línea, Rubén Pacheco, uno de los integrantes del Patronato que más voz tuvo en la reunión de ayer, insistió en la tardanza a la hora de poner en marcha la citada escuela de música, pendiente desde meses atrás. «Pido celeridad y énfasis para que las acciones que acuerda tomar el Misteri se pongan en práctica de una forma más rápida», reclamó Pacheco. Pero, sin duda, una de las intervenciones más llamativas, que realizó el patrono incorporado hace un año, fue para decir que «tenemos 40 niños en la Escolanía, pero no nos tenemos que conformar. Deberíamos tener 400».

Asimismo, Pacheco añadió que «casi todo el mundo tiene un don para la música y el que no lo tiene se le debería medicar». Entre otras de las aportaciones, el patrono reconoció que «sé que se está haciendo un esfuerzo para formar a los cantores, pero es necesario elaborar y difundir ya el material didáctico para los colegios. No podemos ofrecerle a los cantores la formación de hace 40 años».

Por su parte, Mari Carmen Baeza, también reclamó la importancia de «fomentar la enseñanza entre los niños y prestar más atención al que le cueste». A su vez, Zoilo Martín de la Sierra apostilló que la creación de una escuela de música «puede ser rentable para el Misteri, ya que tenemos los medios y solo falta ponerlo en práctica. Al igual, un campus musical podría ser una fuente muy importante de ingresos».

Más allá de las reivindicaciones, el anuncio de ampliar a un día más las representaciones del ciclo de otoño sirvió para cerrar entre un ambiente más relajado la sesión de ayer. El presidente de La Festa, Fernando García, hizo público que para este año habrá Misteri el 28 de octubre, además del 29, 30 y 1 de noviembre (por la mañana y por la tarde). Esta decisión, aprobada en la última junta rectora, ha sido motivada por el interés creciente en asistir a las jornadas extraordinarias.

Financiación

Por otra parte, un sector de los últimos patronos que se incorporaron solicitaron aprobar nuevas directrices para potenciar la Festa, entre las que se incluyen acciones de conservación y protección, la recuperación de antiguas tradiciones, la formación de los cantores y escolanos, fomentar la convivencia y conseguir más financiación. De hecho, durante la convocatoria de ayer, el Patronato aprobó un presupuesto de gastos para 2017 de 328.000 euros y unos ingresos ordinarios de 285.000 euros, a los que habrá que añadir distintas aportaciones, principalmente las de empresas privadas. Y es que, los ingresos del Misteri se limitan a la venta de entradas (42.000 euros), conciertos (4.000 euros), venta de publicaciones (3.900 euros), subvenciones de la Generalitat (48.000 euros), de la Diputación (24.000), del Ayuntamiento (90.000) y del Ministerio (30.000).