Una treintena de padres de Elche padres de Elche se ha unido ya en la Plataforma por la Información y la Promoción de los Valores de la Jornada Partida, o Plataforma por la Jornada Partida, como ya la conocen entre ellos. Todo empezó hace unas semanas en un aula del colegio ilicitano de El Palmeral, pero, poco a poco, han ido llegando a más centros de Elche. El objetivo ahora es crear una asociación para defender su postura. Mientras tanto, ya han puesto en marcha un grupo de Facebook, Info Jornada Partida El Palmerar-Elx, y una dirección de correo, plataformajornadapartida@gmail.com, para que todos los padres y madres interesados puedan intercambiar inquietudes y estudios sobre las ventajas de la jornada partida. Los argumentos que utilizan en contra del horario intensivo son los siguientes:

1- Se amparan en los estudios que apuntan a que a las dos horas y media el cerebro se satura y es necesario hacer un descanso.

2- Sostienen que la jornada continua va contra la alimentación de los niños y su metabolismo, sobre todo de los más pequeños, que deberían comer entre las doce y la una del mediodía. De lo contrario, temen que se pueda favorecer la obesidad, la diabetes, las intolerancias y otras enfermedades.

3- Alegan que si la jornada es de nueve de la mañana a dos de la tarde, eso puede tener consecuencias en las relaciones sociales de los niños, porque estarán en clase y luego se irán a casa y no podrán estar con sus compañeros. «No es lo mismo un parque, donde están con los padres, que un colegio», aducen.

4- En su opinión, el horario continuo sólo favorece a los funcionarios y docentes, pero va en contra de la conciliación de las familias que trabajan mañana y tarde.

5- Se quejan de que, pese a que se vota el 15 de septiembre, no han podido ver los proyectos de los centros. Lamentan eso, y que las clases arrancan el 8 de septiembre y unos días después se votará. «¿Podremos optar si sale la opción contraria a un cambio de colegio?», cuestionan. Además, les generan dudas otros aspectos. «La jornada continua, de aprobarse, estará vigente tres años. Si no sale, ¿habrá que votar otra vez por la jornada partida al año siguiente?», plantean.