Más de 300 personas, según datos de la Policía Local, se concentraron ayer por la mañana frente al hotel de Arenales del Sol para mostrar su malestar por la paralización de las obras del edificio. «Sí, sí, sí, queremos trabajar» o «paralizaciones no son soluciones» fueron algunos de los lemas coreados por los asistentes.

La protesta, organizada por la asociación de vecinos de la pedanía ilicitana, también incluyó el cierre de una gran mayoría de los negocios de Arenales del Sol durante la hora que duró la acción, desde las 10 a las 11 horas.

Tras las pancartas con los mensajes «Arenales quiere hotel» y «Hotel = Futuro» se encontraban vecinos, comerciantes y antiguos trabajadores del complejo, así como el representante de los vecinos, Fernando Cano, el alcalde pedáneo, Alejandro García y los dos concejales de Ilicitanos por Elche. Los antiguos trabajadores del hotel expresaron su malestar por la paralización de las obras y acudieron a la concentración «para ver si sigue adelante la obra o no». Así, José Rubio y Fernando Sánchez, dos encargados de obra durante los trabajos de remodelación del hotel, se quejaron de que les comunicaron el cese temporal de los trabajos en el hotel hace dos meses de forma abrupta. Rubio afirmó que «en cosa de unas horas, de la mañana a la tarde, ya no teníamos trabajo». También consideró que las condiciones del edificio por dentro eran peligrosas pero que ahora lo son mucho más al haberse quedado a medias. Entre 25 y 30 personas, más el personal de las oficinas se quedaron sin trabajo tras la paralización de las obras.

Fernando Cano, presidente de la asociación de vecinos de la pedanía y organizador de la protesta, no descarta nuevas concentraciones en un futuro y asegura que estas dependerán de la evolución de la situación del hotel y de la respuesta de Costas.

Por su parte, el concejal de Ilicitanos por Elche, Fernando Durá, declaró que el alcalde de Elche no está dialogando lo suficiente con Costas para conseguir la resolución de las adecuaciones del hotel y afirmó que «de lo que se dice a lo que se hace hay un trecho».

El concejal de Ilicitanos por Elche cree que la responsabilidad de la continuidad de las obras es de Costas «pero el interés por que sigan adelante debe ser del Ayuntamiento de Elche».

La opinión más compartida por los vecinos y comerciantes asistentes al acto fue que ven necesaria la continuación de las obras porque piensan que traerá más prosperidad económica a Arenales del Sol.

Asimismo, varios vecinos declaraban que querían volver a ver el hotel funcionar tal y como lo habían conocido hace más de cuarenta años. Una de las asistentes, Francisca Pérez es propietaria de un piso en Arenales y veranea en el área desde que era pequeña. La propietaria afirmó que «la carta postal de Arenales eran las dunas y el hotel a pie de playa». Y cree que desde que el hotel cerró, la imagen que ha quedado es tétrica. «A veces viene familiares a la zona y no tenemos sitio en casa y no tienen donde alojarse», comentó otra vecina que pide más atención a las demandas de los propietarios de viviendas en la pedanía.

La vecina Encarnación Rioja, comentó que siente que el Ayuntamiento tiene abandonado a los habitantes del área y que «se preocupan más por tener una playa para perros que por los demás». Según su opinión, los trámites para conseguir un litoral adaptado para los canes el año que viene se ha concretado en cuestión de pocos meses y no ha sido así con la continuidad de las obras del hotel.

Fernando Cano reconoció tras la protesta que los vecinos le han pedido más movilizaciones e incluso una manifestación, que se plantearán organizar en un futuro. Lo que sí que tienen claro es que a partir de la semana que viene harán una recogida de firmas por la continuidad de las obras del complejo y que la dirigirán a Costas próximamente.