Aunque en el IES Torrellano no son supersticiosos, el curso en el que su centro educativo cumple 13 años se les está complicando a nivel de instalaciones. Y es que ya son tres los problemas que han tenido con diferentes paredes de un instituto que, tanto su director como algunos padres, no creen que se rematara durante su construcción correctamente. El pasado mes de marzo se les cayó un muro en la zona del parking, que comenzó a presentar importantes deficiencias en noviembre. Durante este curso también han detectado un abombamiento en una pared del trinquet, que tienen acordonado.

Recientemente, han observado varias grietas importantes entre los ladrillos caravistas de parte de la fachada, por lo que han tenido también que restringir el paso a esta área con cinta. «Lo han analizado técnicos de Generalitat y nos han comentado que pretenden realizar una actuación sobre ella en profundidad. Esperamos que lo hagan durante el verano y que esté listo de cara al próximo curso, sobre todo por la seguridad de los escolares, ya que por las tardes aquí no hay nadie y si se cuela alguien, tememos que se le pueda caer un cascote», argumentó ayer José Vicente Orts, director del IES Torrellano.

Fuentes de la Conselleria especificaron que ya han realizado una parte de la actuación quitando ladrillo y se ha tratado la zona para que no haya riesgo de desprendimiento. «Queda una segunda fase de reparación, cuyos plazos determinarán los técnicos», aclararon. Sin embargo, a pesar de que subrayan que no hay riesgo de caídas de cascotes, esa área continúa acotada.

José Vicente Orts no entiende cómo en solo 13 años están teniendo tantos problemas. Lo que sí quiso dejar claro, para tranquilidad de los padres, es que de momento los problemas no son estructurales, por lo que no afectan a la estabilidad del edificio.