El precio de la vivienda vivienda se ha incrementado en Elche un 3,2% en el último año, una subida tímidasubida aunque significativa, pues llega después de seis años en los que el coste de los inmuebles coste inmuebles ha estado en continua bajada por el pinchazo de la burbuja inmobiliaria.
Los últimos datos extraídos de 2015 revelan este aumento con respecto al año anterior y sitúan el precio medio de la vivienda en el municipio en torno a 806 euros el metro cuadrado, unas cifras muy alejadas de los 1.700 euros que se pagaban en plena bonanza económica y que llevaron al estallido de la burbuja inmobiliaria.
Esta leve subida supone para la Concejalía de Urbanismo la confirmación de la mejoría que, aunque lenta, atraviesa el sector de la vivienda que alcanzó su momento más bajo en 2013, comenzó a repuntar en 2014 y el pasado año reafirmó su ascenso.
Teniendo en cuenta años anteriores, entre 2008 y 2014 se ha registrado una bajada paulatina, de manera que la vivienda venía depreciándose, llegando a caer el precio casi un 50% a lo largo de esos años, según datos de la Concejalía de Urbanismo.
En este sentido, el edil del área, José Manuel Sánchez, explicó que los últimos registros «son datos positivos ya que indican la recuperación de un sector que ha sufrido mucho con la crisis». Además, «no se contempla el planteamiento de llegar a cifras anteriores a la crisis. La construcción de viviendas ha de ser sostenible e ir adecuada a una demanda lógica del mercado», apuntó el edil.
José Manuel Sánchez destacó que esta ligera recuperación en la edificación residencial es positiva porque «se está generando movimiento económico en el sector y, sobre todo, una recuperación de puestos de trabajo».
En este sentido, el 2015 fue el segundo año en que aumentó el número de afiliados a la Seguridad Social. En concreto se registraron 392 nuevos trabajadores vinculados a la construcción.
Además, otro dato que confirma esta ligera recuperación es el hecho de que por primera vez desde que se iniciara la crisis aumenta la demanda en el casco urbano, es decir, hasta ahora la recuperación venía de la mano de la construcción en pedanías y dentro de ellas era Arenales del Sol, por el atractivo del sol y la playa, que tiraba del carro del sector del ladrillo. Y en ocasiones quienes tiraban de esa demanda eran incluso ciudadanos extranjeros.
Sin embargo, la construcción en el casco urbano se ha cuadruplicado. Así, las nuevas viviendas en el centro de la ciudad suponían un 13,2% de la construcción total en 2014 y el pasado año ya eran el 37,3%.
José Manuel Sánchez explicó que «aunque en términos totales se sigue construyendo más en pedanías, los últimos datos muestran el aumento de la demanda de licencias comienza a ser mayor en el casco urbano». Dentro de éste, las áreas con mayor demanda serían Altabix, San Antón y la zona del Corte Inglés, señaló el concejal.
Asimismo, en las pedanías destaca la demanda de Arenales «donde también es muy importante el sector turístico y hay promociones destinadas a extranjeros de nivel medio o alto», apuntó Sánchez.
En términos absolutos, el pasado año se registraron 394 licencias para viviendas nuevas -tanto de protección oficial como libres-, de las que 238 eran para inmuebles en pedanías, principalmente en Arenales; 147 para construir en el casco urbano y 9 para parcelas rústicas.
Frente a ello el año anterior, se otorgaron 243 licencias, de las que 199 eran para Arenales del Sol y sólo 32 para el casco urbano; además de otras 12 para edificar en suelo rústico.
