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La cumbre del Levante vertical

Elche cumple 30 años como capital de los deportes de montaña pese a la escasa altitud de su relieve

Imagen de la sede de la Federación Valenciana ubicada en Elche. sergio ferrández

Al norte de Elche, a unos modestos 400 metros en su cota más prominente, la sierra del Tabayá presume, desde hace 30 años, de ser el punto más elevado de la más alta instancia del deporte de montaña deporte de montañaen la Comunidad Valenciana. Y es que, pese a la escasa imponencia de su relieve, la federación autonómica asienta su sede en la localidad ilicitana.

La curiosidad responde a una cuestión meramente administrativa: la gestión al frente de la institución de su presidente, el ilicitano Francisco Durá, reelegido hasta en ocho ocasiones desde 1986. «Puede estar en cualquier lugar desde Morella a Pilar de la Horadada, pero la gente sigue dándonos su confianza», indica desde la oficina en la que se expiden las licencias a toda la comunidad. La temporada pasada, más de 18.000 deportistas castellonenses, valencianos y alicantinos formalizaron su condición en las instalaciones de la calle Mariano Luiña con la posesión de un permiso plagado de ventajas, como la opción de participar en competiciones, el descuento en refugios o el acceso a rocódromos, además de la cobertura en caso de accidentes o pérdidas obligada por ley.

El trámite debe actualizarse al comienzo de cada curso y en lo que va del actual ya se superan los 10.000 federados. «Cada año hay un 30% de personas que no renuevan y un 40% más de gente nueva, por lo que siempre sumamos adeptos», desgrana Durá, uno de los más ilustres montañistas locales con cumbres conquistadas como el Huascarán de Perú o el Kilimanjaro, en Tanzania.

En Elche, concretamente, también crece la afición. Prácticas como la escalada, el senderismo, el «running» o el ciclismo por montaña son cada vez más socorridas, como demuestra la proliferación de hasta cinco clubes nacidos en el municipio: la Unión Excursionista, el Grupo de Atletas Montañeros, el Grupo Ilicitano de Montaña y Espeleología, Batallón y los Machacapiedras. «Hay un boom por las carreras de montaña aquí y en toda España, en muchos casos ligados a clubes de atletismo», analiza Durá. «Vengo del asfalto, empecé a probar y es un hobby que me relaja mucho y disfruto compartiendo con más gente», admite Pedro Antón, de los Machacapiedras.

Pero el desnivel autóctono para los amantes del paisaje vertical se limita a la zona del pantano e invita muchas veces a trasladar la ruta a otros escenarios de la provincia como la sierra Vella de Crevillent, el Cabeço d'Or, la Cruz de la Muela o Puig Campana. «En Elche hay que hacer más kilómetros a más velocidad y si quieres exigirte para ir avanzando debes cambiar el entrenamiento a otros sitios», resume Antón.

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