El tripartito ha comenzado a elaborar un censo de personas que viven en la calle. Con personal de Emergencias y voluntarios de Protección Civil, desde Bienestar Social han puesto en marcha un registro de indigentes, a raíz de la activación del protocolo contra el frío que se ha ejecutado durante este fin de semana. «El objetivo es hacer un estudio para conocer a aquellas personas que requieren de los Servicios Sociales y los que no», apuntó la edil de Bienestar Social, Tere Macià. En esta línea, en función de los resultados finales, una vez hecho el informe, el objetivo es facilitarles los recursos municipales. «Estamos localizándolos con el fin de derivarlos a los Servicios Sociales y a los albergues, ver sus cuáles son sus necesidades», explicó la concejal del área.
El protocolo de actuación policial con personas sin hogar, en caso de producirse situaciones climatológicas adversas, por debajo de los cinco grados, se ha comenzado a activar esta semana durante dos noches. Según el procedimiento establecido, los servicios de la Policía Local se encargan de detectar a todas las personas sin hogar y de consultar con el albergue de Cáritas sobre la posibilidad de alojamiento de estas personas. La dotación policial es la encargada de trasladarlos en una patrulla hasta las instalaciones de Cáritas o bien a través de la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil. Por otra parte, el protocolo también contempla los casos de personas sin hogar que no quieren pernoctar en el albergue, con lo que los voluntarios se ocupan de facilitarles algún alimento o mantas.
