Un hombre de 43 años de edad ha ingresado en prisión al ser condenado a dos años de cárcel después de reconocer ante los juzgados de Instrucción número 5 y de Violencia Sobre la Mujer número 1 de Elche haber amenazado a su expareja y quebrantar la orden de alejamiento que tenía respecto de la mujer, además de encañonar con un arma simulada a los agentes de la Policía Nacional que acudieron a auxiliarla. La detención se produjo el miércoles poco antes de las 21 horas en la calle Clemente González Valls de la zona nueva de Altabix, cuando la central que controla las pulseras telemáticas de los maltratadores recibió una alerta porque el hombre se acercaba al domicilio de su expareja, de nacionalidad francesa, protegida por una orden de alejamiento.
El ya condenado se presentó ante la puerta del edificio, comenzó a propinar golpes al portal y proferir amenazas de muerte contra la mujer, que estaba en el interior de su domicilio. La Policía Nacional a través del Servicio de Atención Familiar (SAF) estuvo en contacto con la mujer y siete agentes en diversas patrullas se dirigieron rápidamente al lugar. Al verles llegar, el hombre trató de emprender la huida corriendo, y acabó escondiéndose detrás de un vehículo que estaba estacionado, encañonando con una pistola a los agentes, amenazando a gritos con que les tenía a tiros y estaba dispuesto a disparar: «¡Hoy me llevo a alguien por delante si hace falta!», gritaba a los policías, ante el estupor de los vecinos.
En ese momento, en el que había personas por la calle y en los balcones, los agentes pidieron a gritos a todo el mundo que se escondiera para evitar que alguien pudiera resultar herido y rodearon al hombre, tratando de convencerle para que soltara la pistola y a su vez apuntándole con las armas reglamentarias. Al cabo de unos minutos y en un descuido del hombre, los agentes consiguieron reducirle y arrebatarle el arma, comprobando que se trataba de una pistola «airsoft» simulada, y encontrándole también una navaja en un bolsillo que había intentado alcanzar en el forcejeo sin conseguirlo.
Disposición
El hombre fue detenido y puesto a disposición judicial al día siguiente, precisamente cuando entraba en vigor una reforma que atribuye los quebrantamientos de órdenes de alejamiento a los juzgados de Violencia Sobre la Mujer. Por ese delito el hombre aceptó seis meses de prisión y otros diez por un delito de amenazas graves a su expareja.
Paralelamente, el Juzgado de Instrucción número 5 en funciones de guardia incoó diligencias urgentes por el delito de atentado contra agentes de la autoridad, por el que aceptó una pena de ocho meses. El hombre ingresó en prisión para cumplir una condena total de dos años.
