El plazo para presentar candidaturas a la presidencia de Riegos de Levante acaba hoy a las 14 horas, después de que a lo largo de la jornada de ayer dos candidatos hicieran pública su intención de concurrir a las elecciones. El primero fue Ángel UrbinaÁngel Urbina, hasta ayer mismo portavoz de la Comunidad General Riegos de Levante y ligado a la entidad desde hace dos décadas, presidente desde hace siete años de una de las comunidades de base Cuarto de Levante y Séptimo de la Peña (además de presidente de la SAT San Enrique o portavoz de la Junta Central de Regantes del Júcar-Vinalopó). A última hora de la tarde emitió un comunicado Javier Berenguer, presidente de la comunidad El Canal desde 2013, la más numerosa de las ocho que integra Riegos de Levante con 8.000 comuneros, manifestando también su intención de concurrir.
Ángel Urbina anunció en primer lugar que cesaba en su cargo como portavoz, a continuación que el actual presidente, Manuel Serrano Richarte, ha decidido no presentarse a la reelección después de 20 años al frente, y finalmente que él da un paso al frente a petición de muchos regantes y compromisarios que se lo han pedido. Hizo el anuncio ante un monumento del Parque Municipal dedicado a José María Serra y Alonso del Real, ingeniero que fundó durante la primera Guerra Mundial la compañía que acabó siendo Riegos de Levante al advertir que el Segura se perdía en el mar y que remontar el agua y crear los embalses de El Hondo permitiría llevar la agricultura a otros territorios. Lo hizo como un gesto consciente con la intención de reivindicar su formación técnica: «Dirán que soy continuista con Manuel Serrano, no voy a negar que he trabajado con él a lo largo de años en los que se han conseguido muchas cosas, pero antes de que nadie lo diga, él no va a estar dirigiendo detrás de mí; yo soy una persona distinta, mis orígenes están en la ingeniería y creo en que existe para mejorar la calidad de vida de las personas».
Urbina añadió que entre sus prioridades si resulta elegido está «aglutinar todas las sensibilidades porque los tiempos son difíciles y Riegos de Levante es una entidad fuerte si estamos unidos», además de «cambiar las ordenanzas que nos hizo la Confederación Hidrográfica del Segura hace 25 años provisionalmente, para crear vicepresidencias, separar la gerencia de la secretaría general y constituir comisiones» y por otro lado «dar formación a los trabajadores para que se modernicen, porque Riegos de Levante tiene que empezar una nueva época, la del siglo XXI». Urbina insistió en «unir» a todos los comuneros y rehusó entrar en polémicas durante la campaña.
Camino
Javier Berenguer dio el paso al obtener «el apoyo suficiente a su proyecto de cambio y el convencimiento de que inicia el camino correcto», según hizo público en un comunicado, «tras varias reuniones con representantes de distintas comunidades». El presidente de El Canal expuso que busca la participación de todas las comunidades de base y que su proyecto está «abierto a incorporar las sugerencias y mejoras que se consensúen entre las ocho comunidades actuales», abogando por el «consenso» frente a «la imposición de criterios que se ha venido haciendo hasta ahora». Su objetivo principal para los próximos cuatro años es «luchar por garantizar para nuestro campo y para nuestros agricultores los recursos hídricos necesarios y de calidad» con la suma de «todas las energías y recursos posibles» para defender «sin tregua» los intereses del campo alicantino ante una situación extremadamente delicada.
Berenguer plantea que «la inoperancia de las administraciones, las luchas internas entre representantes y los trámites burocráticos han dormido en el sueño más profundo a las actuaciones reclamadas desde hace años por los agricultores» que no han importando «a quienes han debido actuar antes». Así, se comprometió a abrir nuevos caminos dado que en los últimos años «no han conseguido resolver nada; prueba de ello es que nos encontramos otra vez con una espada sobre nuestros cultivos».
Añadió que modificará la Comunidad General para adoptar su estructura y recursos a las necesidades reales de las comunidades de base, que han evolucionado con los años. En cuanto a la gestión económica, criticó el incremento del endeudamiento de Riegos de Levante en 2014 por más de tres millones y unas pérdidas de 700.000 euros en el último ejercicio cerrado (2013), además de la «falta de inversiones en mantenimiento de instalaciones». Finalmente, aseguró que promoverá para Riegos de Levante los criterios de «profesionalización y transparencia que ya ha implantado en la Comunidad de El Canal» y que «han conseguido volver a hacer partícipes a los comuneros de la gestión de la Comunidad».
