La Real Orden de la Dama de Elche lamentó ayer la negativa del Gobierno a negociar el regreso del busto de arte íbero a la ciudad. El presidente de la entidad, Antonio Martínez Camacho, dijo que «esto supone una postura inmovilista que, choca frontalmente con los postulados de aquellos quienes propiciamos o propugnamos un mayor acercamiento de la Dama a los ilicitanos, a través, al menos, de cesiones temporales periódicas y programadas».

Históricamente, indicó Martínez Camacho, «los alcaldes ilicitanos han luchado y propugnado por el regreso de la Dama a nuestra ciudad, pero tan solo uno de ellos, Diego Maciá, consiguió ver colmados sus deseos al menos temporalmente. Los gobiernos autonómicos tiempo ha que ni se planteaban -hasta la llegada del actual- la reivindicación ilicitana, fundamentalmente por el servilismo secular de los gobiernos autónomos conservadores al centralismo estatal». Desde la entidad valoraron que «esta confrontación del Gobierno de la Nación con el sentir mayoritario del pueblo ilicitano no tiene ninguna justificación y, si el gobierno se opone a los intereses generales de Elche, o debe de cambiar el gobierno, o deben de cambiar los que están al frente del mismo, o deben de cambiar aquellos que están en disposición de tomar decisiones técnicas o políticas en contra de los intereses generales».

Finalmente, Antonio Martínez Camacho apuntó que «ahora más que nunca creo que la iniciativa ciudadana debe de ponerse en marcha y hacer frente a los criterios políticos que van en contra de los intereses generales de la ciudad». J. A. M.