El alcalde de Elche, Carlos González, utilizó una frase de 1931 de Fernando de los Ríos, ministro de Justicia en la II República, para invitar a los miembros del pleno a ser críticos en este nuevo mandato que se inicia, pero sin perder el orden y el decoro: «En España lo verdaderamente revolucionario sería que hubiera respeto», rememoró el primer edil, quien a su vez instó a los representantes municipales a que «sean revolucionarios, sean respetuosos». En su declaración de intenciones, el alcalde pidió dejar de lado la crispación del anterior mandato y sustituirla por la «discrepancia razonada y razonable» con un «tono cortés y educado». Por otra parte, el inicio y el final del pleno estuvieron marcados por una declaración institucional en apoyo de los derechos del colectivo gay, que culminó con la colocación de la bandera arcoiris en el Ayuntamiento.

Por otro lado, Podemos, sin representación en el Consistorio ilicitano, tachó ayer de «lamentable» que el alcalde y los ediles no se hayan bajado el sueldo, «pues Carlos González cobrará 4.276 euros brutos, una cifra mayor que el de las alcaldesas de las ciudades más importantes del país, como Manuela Carmona en Madrid (2.590 ?) o Ada Colau en Barcelona (2.200 ?)». J. M. G.