Desde ayer y hasta el próximo 1 de septiembre las piscinas municipales de Elche permanecerán abiertas. Y lo hacen, de momento, con pocas novedades respecto a años anteriores. Y es que el abono de adulto para todo el verano sigue costando 60 euros pero el infantil pasa de costar 30 euros a tener un precio de 40. El bono de 30 baños tiene un precio de 60 euros, igualando el precio del abono de verano y el infantil en esta categoría tiene un coste de 30 euros.
Asimismo el bono adulto de 10 baños cuesta 25 euros mientras que el infantil, 15 euros. Los baños únicos para los adultos tienen un precio de 3 euros y para los niños de 3 a 14 años, 1,90 euros.
A todo ello se suma un 25% de descuento que tienen las familias numerosas y para aquellos que presenten el «carnet jove» o puedan acreditar que son estudiantes.
En cuanto al horario de apertura y uso libre, este se concentra entre el martes y el viernes, de 11 a 19 horas. Los sábados el horario será de 10 a 20 horas y los domingos y festivos de 10 a 19 horas, como en el pasado año. Asimismo los días en los que haya cursos el horario será de 11 a 18 horas. Por su lado, todos los lunes las piscinas municipales permanecerán cerradas.
Los cursos este año se impartirán de martes a viernes desde el 26 de junio hasta el 3 de agosto en la casi veintena de piscinas que actualmente tiene la ciudad.
Refresco ilegal
Durante esta semana debido al calor numerosos menores no pudieron esperar hasta el día de ayer y se colaron en las piscinas del Parque Deportivo de la ciudad, pese a que todavía permanecían cerradas al público. Este hecho no es la primera vez que ocurre ya que, sobre todo, en las piscinas céntricas algunos jóvenes aprovechan la nocturnidad para, tras salir de fiesta, darse un chapuzón.
Hace unos años varios jóvenes también se colaron en las piscina del Parque Deportivo y el entonces concejal de Deportes, Daniel Rubio, explicó que se trataba «de un problema ocasional que se producirá hasta que abramos las piscinas». Además, el edil advirtió entonces de que las piscinas estaban cercadas y cerradas, por lo que las personas que acceden a ellas lo hacen saltando y colándose de forma ilegal y bajo su responsabilidad. Y es que hasta ayer las piscinas carecían de socorristas por lo que cualquier accidente o emergencia estaba totalmente desatendido.
