El presidente de la Confederación del Taxi de la Comunidad Valenciana, Fernando del Molino, señalaba ayer que el problema del intrusismo «es algo global, aunque se masifica más en las zonas de costa, en las estaciones y en los aeropuertos». La temporada estival está ya aquí y es cuando los taxistas pueden recuperarse de todo el invierno. «No pagan impuestos y se llevan a nuestros clientes», denuncia Del Molino, quien agrega que en estos primeros pasos que van a dar los taxistas de la Comunidad (en la provincia de Alicante se calcula que hay más de 1.200. En Benidorm más de 200 y en Elche algo menos de esa cifra) se incluye también ser recibidos por el actual gobierno en funciones de la Generalitat Valenciana puesto que el verano ya está aquí.

Y es que este colectivo aspira a que más que se incrementen las sanciones, a que lleguen a su destinatario y se ejecuten. Pero además, que se adopten verdaderas medidas de vigilancia y control sobre aquellos vehículos que operan sin licencia, al margen de cualquier normativa y sin garantías para el cliente.