Tras un intenso día de votaciones, Vicente Pascual Pascual, fue elegido ayer como nuevo decano del Colegio de Abogados de Elche. Las elecciones a la Junta de Gobierno contaron con una gran participación, donde 445 abogados ejercientes y no ejercientes, de los 981 inscritos en este órgano, emitieron su voto.

Así, la candidatura continuista, encabezada por el anterior secretario de María del Carmen Pérez Cascales, la decana de los dos últimos mandatos, obtuvo el triunfo, duplicando los votos de la candidatura rupturista de José Antonio Alarcón.

Vicente Pascual, que lleva en la Junta nueve años, y que es abogado desde hace 35, señaló que ahora el objetivo es «profundizar en la actual línea de trabajo, hacer toda la programación de cursos de formación para 2015, impulsar el plan de desarrollo de nuevas tecnologías y abrir más a la participación en las comisiones internas y las secciones e invitar a los jóvenes a que tengan más protagonismo». Según afirmó el propio Pascual «las votaciones han transcurrido con total normalidad, según las previsiones que teníamos y con un "fairplay" excelente por parte de la otra candidatura».

De esta forma, los doce integrantes de la candidatura continuista han salido elegidos como miembros de la nueva Junta de Gobierno que sustituye a la que hasta ahora era decana, María del Carmen Cascales.

El nuevo equipo de Gobierno queda integrado por: Vicente Pascual; Rosana Poveda, Vicente Serna, Luis Antón, Antonio Vicente, Jaume Sempere, Antonio Prats, María Pilar Peña, Salvador Reyes, Rosa María López, Mónica San Emeterio y Nadia Almarcha.

Candidatura rupturista

La otra candidatura presentada era la rupturista. Encabezada por José Antonio Alarcón, estaba integrada por un equipo de personas que nunca habían tomado parte de ninguna junta y que incluía nueve letrados del turno de oficio. Este en su programa defendía como prioridad «reducir la cuota y los precios de los cursos de formación, dado que algunos jóvenes ni siquiera se plantean acudir al ejercicio profesional u optan por opositar», beneficiando también a quienes precisen reciclarse profesionalmente, según afirmó Antón. En cuanto al aspecto económico proponía rentabilizar el edifico del Colegio de Abogados haciendo uso para convenciones, congresos u otros eventos.