Las obras para la instalación del alcantarillado en la pedanía ilicitana de Peña de las Águilas darán inicio en marzo o abril de 2015.

La actuación, que se dividirá en 6 ó 7 fases y que se prolongará en total durante dos o tres años, supone remediar una reivindicación histórica para esta partida de Elche que carece de esta infraestructura hidráulica.

En suma se podrán beneficiar unos 4.000 vecinos y un millar de viviendas, incluidas las de otra zona rural como es el Llano de San José, gracias a la instalación de más de 35 kilómetros cuadrados de tuberías.

La inversión global asciende a unos 12 millones de euros, de los cuales 5,6 millones serán asumidos por Aigües d'Elx, la empresa mixta formada por el Ayuntamiento y la firma Hidraqua, y el resto por la Confederación Hidrográfica del Júcar y el Gobierno de España.

Aigües d'Elx asume parte del coste de la obra a cambio de ver prorrogada la concesión para la gestión de los recursos hídricos en el municipio. Aigües d'Elx gestiona el agua en Elche desde el año 2001 y hasta ahora el contrato era por espacio de 25 años. Sin embargo, con la actuación en Peña de las Águilas y otras inversiones en otros puntos de la ciudad, en lugar de finalizar el acuerdo en 2026, concluirá 16 años después, es decir, en el año 2042.

Por su parte, los vecinos beneficiarios tendrán que pagar entre 500 y 3.000 euros, en función de los casos, para poder engancharse a la nueva red de alcantarillado y abandonar definitivamente sus respectivas fosas sépticas.

El pasado viernes la junta de gobierno del Consistorio ilicitano, y el martes Aigües d'Elx -con la ausencia del PSOE y la abstención del Partido de Elche, según señaló ayer el concejal de Infraestructuras, Vicente Granero- dieron el visto bueno a sacar a licitación la primera fase de estas obras en Peña de las Águilas.

Este primer ramal se ha sacado a concurso por 845.000 euros y contempla un plazo de ejecución máximo de 9 meses. Estas obras serán las que comiencen en marzo o abril y afectarán a unas primeras cien viviendas, las cuales sufrirán cortes de calles y de caminos. La actuación afectará a la urbanización Don Balbino, en concreto en las calles Lucerga y Bolivia.

En función de cómo se desarrolle esta primera fase se podrá ir licitando progresivamente el resto de fases y, por tanto, se irá viendo sobre la marcha si todas las actuaciones pueden estar concluidas en tres años o limitarlas a dos.

Tras acometer las zanjas, la intención es reponer el asfaltado de calles o volver a su estado natural los caminos, mejorando éstos en algunos casos.

Granero explicaba ayer que la zona de actuación rural es tan grande como si se interviniera sumando las áreas urbanas del Sector V, Carrús y El Toscar.

Vicente Granero subrayaba ayer que ésta es «otra promesa cumplida» del equipo de gobierno de Mercedes Alonso y que se ha estado trabajando en este proyecto toda la legislatura, además de recordar que los vecinos de Peña de las Águilas y Llano de San José llevan décadas pagando el canon de saneamiento de la Generalitat en sus recibos del agua pese a no contar con este servicio.