La concejal de Sanidad, Cristina Martínez, «invitó» ayer a la alcaldesa, Mercedes Alonso, a unirse a sus reivindicaciones «y salir juntas» para defender los problemas sanitarios de los ilicitanos y subsanar todas aquellas deficiencias que afecten a la ciudadanía. «Espero que la alcaldesa y yo podamos sentarnos a la mayor brevedad posible y podamos salir juntas y decirle al ciudadano que estamos con él, que el equipo de Gobierno al completo estamos con ellos y que vamos a defender juntos tanto la sanidad de nuestra ciudad como aquellas deficiencias que podamos encontrar. Es nuestra obligación como concejales y como representantes municipales y, además, hay que hacerlo llegar a donde corresponda».

Estas declaraciones fueron realizadas ayer por la mañana por la concejal de Sanidad en su visita al centro de salud de San Fermín, donde algunos de los responsables de Primaria -que han dimitido en bloque tras la destitución de Martínez por parte del conseller de Sanidad- mostraron su respaldo a la ya ex directora de Atención Primaria. Martínez recibió el respaldo no sólo de sus compañeros, sino también de un nutrido grupo de ciudadanos que exhibieron pancartas y lanzaron gritos de apoyo para una responsable política que, según argumentaron, ha sido cesada por defender los intereses de los ilicitanos.

Martínez, además, confirmó que hasta la fecha no ha recibido el cese oficial como directora de Atención Primaria del Hospital General, «que me fue comunicado el lunes a las 12.48 telefónicamente después del pleno tras recibir un mensaje en el que se me pedía que llamara a la directora general de Asistencia Sanitaria». La desde el lunes ex directora de Atención Primaria explicó que no ha tenido oportunidad de realizar el habitual relevo con su sucesor, «algo que me parece importante con la llegada de las vacaciones para explicarle cómo se habían organizado en los centros de salud».

La edil de Sanidad reiteró que en los tres años que ha sido directora de Primaria ha intentado canalizar los problemas a través de los responsables de la Conselleria. «Una vez que vi que era imposible, decidí utilizar el turno de ruegos y preguntas en el pleno para pedir que juntos solicitemos a la Conselleria que trabaje en defensa de la sanidad de los ilicitanos».

Martínez agradeció un «apoyo que no podía ser de otra manera viniendo de la ciudad de Elche. Somos gente que cuando algo no nos gusta salimos y lo decimos, independientemente de las represalias que pueda haber». También valoró positivamente Martínez la dimisión en bloque de la mayor parte de responsables de los centros de salud «porque creo que han entendido el mensaje que quise trasmitir sobre lo que está pasando con la sanidad en nuestra ciudad y solamente quiero pedir que los grupos políticos instemos a la Conselleria para que tome cartas en el asunto y que estudie la situación. No pedía dinero, sino que hiciéramos nuestro trabajo y que encontráramos soluciones a problemas que se pueden solventar sólo con un poquito de reorganización y con diálogo».

Por su parte, el conseller de Sanidad justificó la destitución porque desde hacía tiempo «había una mala convivencia entre el equipo directivo y la doctora Martínez que se cristalizó en una petición de cese por parte del gerente el día 25 y que recibió el visto de la directora general el 26. Al día siguiente se me subió el documento de propuesta y lo firmé. Lo ocurrido no digo que sea necesariamente una cuestión de causa-efecto, pero es llamativo que la intervención de la doctora Martínez se produjera el día 30. En cualquier caso, había una difícil convivencia tanto con el gerente como con gran parte del equipo directivo».