Recuperar el «esplendor» de antaño es el objetivo prioritario de los empresarios del polígono de Carrús que forman parte de la asociación Época y que pretenden mejorar las infraestructuras y el aspecto exterior de la zona con la intención de servir de reclamo para la instalación de nuevas firmas comerciales. «Queremos que el polígono de Carrús vuelva a ser lo que fue hace 20 años. En ese tiempo el equipo de Gobierno anterior nunca apoyó a las empresas que se marcharon de aquí y que fueron a instalarse muy cerca, a pesar de que era en Elche donde creaban riqueza y empleo», explicó Diego Agulló, el presidente de la asociación Época, un colectivo que lleva dos años trabajando por situar esta zona industrial de la ciudad en el lugar que merece.

El polígono cuenta en estos momentos con unas 600 empresas en funcionamiento, una cifra muy inferior a la de hace dos décadas cuando, además, la zona industrial de Carrús era el enclave de las empresas más importantes de la ciudad. «El polígono perdió la categoría que tenía. Se decía entonces que era el "sitio de los ricos" y ahora estamos trabajando para que esa situación se recobre. La verdad es que la tendencia está cambiando y, de hecho, en los últimos años se han instalado en la zona empresas como Makro, Leroy Merlin o McDonalds y eso está dando vida a la zona», manifestó Agulló.

Entre las necesidades más perentorias del área se encuentra la de adecentar el entorno de un polígono que tiene cierto aire vetusto y descuidado. Por ello, se ha planteado la necesidad de crear jardines, repoblar los alcorques, así como reparar las aceras y mejorar los viales. «Las relaciones con el Ayuntamiento son buenas en este momento y se están valorando diversos proyectos para adecentar el polígono», explicó el presidente de la asociación Época, quien destaca que la situación geográfica del polígono es una de las bazas más importantes que debe utilizarse como reclamo para la instalación de nuevas empresas. «El Parque Empresarial de Torrellano es uno de los más bonitos de España y nosotros no nos podemos comparar. Pero nosotros contamos con la ventaja de que estamos, prácticamente, en el centro de la ciudad y tenemos unas comunicaciones inmejorables, con la autovía a un paso, y eso es lo que podemos "vender" a quienes estén interesados en instalarse en Elche».

El sector empresarial del polígono de Carrús está enormemente diversificado en estos momentos. Del «monopolio» que representaban hace unos años las empresas de calzado se ha pasado a una zona industrial en la que convive la industria manufacturera con las empresas de servicios. Carpinterías, almacenes de muebles, ferreterías, empresas de ocio o recreo y talleres de reparación completan el amplio abanico empresarial de una zona en la que queda muy poco suelo para construir y en la que la mayor parte de las naves industriales están ocupadas.

El 15% de las empresas que en estos momentos están ubicadas en el polígono de Carrús están regentadas por lo que el presidente de la asociación Época denomina «la familia china» y que en su mayoría se encuentran integrados en la tarea de mejora y de modernización de la zona industrial. «Nos llevamos perfectamente con ellos e, incluso, uno de los empresarios asiáticos forma parte de la directiva de la asociación. En el polígono tenemos cabida todos los empresarios que estén dentro de la legalidad y ellos lo están. De hecho, hay un gran "feeling" con ellos. Para nosotros es importante que seamos un grupo fuerte para negociar, para hacernos oir. Cuantos más seamos mejor, y nos da igual el color o la lengua de cada uno», afirmó Diego Agulló.

El presidente de la asociación empresarial de Carrús se muestra satisfecho con los niveles de seguridad que existen en el polígono. «Los robos son casi insignificantes y desde hace dos años hay bastante presencia de Policía Local, Policía Nacional y ahora también de la autonómica».

No obstante, los empresarios del polígono tienen en cartera llevar a cabo un proyecto de instalación de cámaras fijas y móviles en las rotondas de acceso a la zona que permitan identificar las matrículas y los coches que acceden al polígono «para tener un mayor control y mantener lejos a los amantes de lo ajeno. Además, el Ayuntamiento podría aprovecharse de esta infraestructura para controlar el tráfico».

A falta de concretar las acciones pendientes, los empresarios de Carrús se esfuerzan por mejorar sus infraestructuras y, sobre todo, por seguir sorteando la crisis económica.