Muchos de los alumnos que estos días han regresado al edificio Altabix para realizar exámenes, hacer pagos en la sucursal bancaria, acudir a la biblioteca, utilizar la sala de ordenadores o, simplemente, iban de paso, se han visto sorprendidos por la amplia zona vallada dispuesta desde finales del pasado mes de julio.

El motivo no es otro que evitar cualquier peligro a la comunidad educativa ya que por parte del equipo de mantenimiento se tuvo conocimiento el pasado 19 de julio de que algunas losetas de las paredes de los voladizos, de las balconadas o paredes superiores, ofrecían riesgo de caída.

La zona acotada posteriormente ha ido ampliándose y en estos momentos la UMH está a la espera de que la empresa constructora del edificio valore la situación y se pueda determinar si esta incidencia es un vicio de la obra ejecutada en su día.

En cualquier caso, desde el Rectorado se anunció ayer que tanto si es responsabilidad de la constructora como si no, las obras se llevarán a cabo "en breve".

Responsables de la UMH, tras tener conocimiento del problema, retiraron los paneles que podían desprenderse, seguidamente delimitaron un perímetro para que nadie transite por el lugar y de este modo ante la posible caída de alguno de los elementos nadie sufra ningún riesgo, y en estos momentos se está en la fase de valorar quién se tiene que hacer cargo de los arreglos, si la UMH o la empresa constructora de este edificio, el segundo más veterano del campus de Elche cuando la Universidad arrancó en 1997.

Desde la UMH se insiste en que no hay ningún peligro y que el problema fue identificado antes de que ocurriera cualquier percance.

De igual modo se asegura que esta incidencia no afectará al normal inicio de las clases y que el acceso a las aulas se realiza sin ningún tipo de problemas.