Fue en uno de los primeros puntos, en el que se debatía la modificación de uso del antiguo Palacio de Justicia, para que pasara de administrativo-institucional a educativo-cultural, cuando se vivió uno de los momentos con más crispación, pese a que contó con el voto favorable de los tres grupos políticos.

El edil de Ordenación Urbana e Infraestructuras, Vicente Granero, expuso que, con la puesta en marcha de la Universidad CEU Cardenal Herrera, "se crearán puestos de trabajo directos e indirectos", y aseguró que "ayudará a revitalizar económicamente este barrio".

En la explicación de voto, el portavoz adjunto del grupo municipal socialista, Antonio Rodes, mostró sus recelos a que "ese edificio municipal se dé a una empresa privada", y añadió que "el CEU es un negocio muy legítimo, pero es una empresa privada y, al mismo tiempo, se está desalojando de El Raval a gente mayor y a más de 300 familias de dependencias municipales". La alcaldesa instó a Rodes a que "se ajustara" al punto, a lo que el edil del PSOE respondió que "me estoy ajustando" y agregó que "esto no es economía, es ideología, porque se ponen los activos municipales al servicio de empresas privadas y se desaloja a las asociaciones", según puntualizó. "Cíñase o le retiraré la palabra", amenazó Alonso, a lo que Rodes le espetó que "hace poquito ha sido el aniversario del 23-F y no albergo ninguna duda de que usted hubiera entrado cogida de la mano de Tejero al Congreso de los Diputados". El revuelo fue inmediato en la bancada popular, hasta el punto de que se llegó a oír algún "sinvergüenza" o comentarios de que "está provocando". Incluso el portavoz del equipo de gobierno, Manuel Rodríguez, le exigió que "retire lo que ha dicho ahora mismo". Por su parte, la alcaldesa le dijo que "está en una institución democrática y los que estamos en este lado de la bancada creemos en la democracia". Además, le apercibió por primera vez.

A continuación, Alonso precisó que, "si no le dábamos sitio a la Universidad, se tenían que ir a otro municipio", y destacó que el objetivo es "mejorar la calidad de la enseñanza y que se ofrezcan más titulaciones". Rodes insistió en que "no me da la palabra porque no es usted demócrata" y Rodríguez apuntó que "está buscando que lo tiren".

El segundo apercibimiento le llegó a Rodes en la votación del Reglamento Orgánico del Consejo Municipal de Integración, cuando el socialista tomó la palabra sin tenerla.