La Junta de Personal del Hospital General y los sindicatos se niegan a aceptar la eliminación de las 26 camas de una de las hemiplantas que la dirección del centro sanitario ha decidido cerrar.

Después del comunicado oficial que hicieron ayer los responsables de las instalaciones hospitalarias, los representantes de la Junta Personal han anunciado que convocarán un pleno la próxima semana para analizar las medidas que se tomarán para "corregir esta decisión que no se merecen ni los trabajadores ni los propios ciudadanos", afirmó José Salvador Giner, secretario de la Junta de Personal. En este sentido, la sesión plenaria irá secundada por una asamblea general en la que se votará la posibilidad de movilizarse.

Desde la dirección del hospital han argumentado que el cierre provisional de la hemiplanta con 26 camas se debe a que los índices de ocupación en el centro sanitario han bajado y ha descendido la presión asistencial.

En este sentido, desde Comisiones Obreras se mostraron también contrarios a la medida y compartieron la necesidad realizar movilizaciones serias. "El Hospital General se encuentra en un índice de ocupación del 87%, dentro del margen establecido como óptimo. La reducción de esas 26 camas supondría llegar al 92%, sobrepasaríamos el índice y pasaríamos a ser un centro saturado otra vez", explica Eduardo Ramírez, de CC OO.

Asimismo, el sindicato planteó la posibilidad de que las habitaciones que quieren cerrar las conviertan en individuales para poder competir con el Hospital del Vinalopó.