El edil de Deportes y vicepresidente de la Fundació de l'Esport Il·licità, Daniel Rubio, comunicó formalmente ayer a mediodía a Fernando Jaén su destitución como director general de la entidad. Jaén, tras conocer su cese, aseguró que "esta medida se produce por la política de austeridad del equipo de gobierno y no por mi gestión, de la que estoy muy satisfecho, aunque la crisis haya afectado a los ingresos de la fundación en los últimos años". La decisión se produce después de que el equipo de gobierno tuviera conocimiento de la deuda que arrastra la fundación, de cerca de 700.000 euros. Además, la institución se encuentra en pleno proceso de disolución desde el pasado año, según confirmaron ayer desde la Conselleria de Justicia y Bienestar Social.

El proceso de disolución, según la documentación a la que ha tenido acceso este diario, se inició en mayo del pasado año, cuando el entonces secretario autonómico de Justicia, Francesc Gamero, alertaba de que el patronato de la fundación no había cumplido con la obligación legal de rendir cuentas ni había presentado presupuestos desde 2005, tal y como establecía la Ley de Fundaciones de la Generalitat Valenciana. Además, se avisaba de que el Protectorado de Fundaciones de la Generalitat no tenía constancia de su funcionamiento ni del cumplimiento de sus fines fundacionales y que, ante esa situación, si no se aportaba la documentación en el plazo de 20 días, se iniciaría el proceso de disolución. En este sentido, desde la Generalitat confirmaban ayer que la documentación, hasta el momento, no se ha presentado.

En cualquier caso, Daniel Rubio avanzó ayer que "vamos a crear una mesa de trabajo en la que tengan participación empresarios y deportistas para estudiar la situación actual, intentar salvar la fundación y establecer las bases de cara al futuro para ayudar a los clubes en la medida de nuestras posibilidades, aunque somos conscientes de que es complicado conseguir 700.000 euros cuando en un año sólo se han sacado 70.000". De hecho, la intención de los responsables municipales es intentar sanear las cuentas y poder presentar la documentación que se requirió en su momento para que se pueda paralizar el proceso.

Respecto a la destitución de Fernando Jaén, explicó que "se debe a que no se han cumplido los objetivos marcados", e insistió en que "no tenemos nada en contra de él e incluso es muy válido en otras facetas". El edil apuntó que "Fernando Jaén no es el responsable de esta situación, han pesado más los compromisos adquiridos por el anterior equipo de gobierno".

Por su parte, Fernando Jaén señaló que "la situación de la fundación es complicada, estamos en una época difícil y no se puede mantener la figura de un director general y de un gerente, y lo lógico es que se prescinda del director general, ya que su función es captar fondos". Incluso afirmó que, "si esto sirve para salvar a los clubes, me parece una medida acertada", aunque sí pidió que "se mantenga la fundación". De hecho, subrayó que, "durante estos años, hemos ayudado a los clubes y a los eventos que se han ido organizado, y es necesario que así siga siendo" e instó a los responsables municipales a "no politizar" la entidad.

Jaén atribuyó el "agujero" de la fundación a la situación económica actual: "Las empresas están muy perjudicadas y muchas de las que comprometieron ciertas cantidades no pudieron cumplir". Finalmente, reconoció que, "desde el momento en el que se produjo el cambio en el Gobierno municipal, me lo esperaba, ya que no deja de ser un cargo de confianza, aunque desde el equipo de gobierno me dijeron que esperara hasta conocer la situación real de la fundación".

Casi 700.000 euros de deuda

Las alarmas sobre la situación de la Fundació de l'Esport Il·licità saltaron hace unas semanas, cuando se detectó que la fundación arrastraba una deuda de 643.323,04 euros, circunstancia que se unía al hecho de que las aportaciones municipales habían sido en los últimos meses sensiblemente superiores a las privadas, ya que, en lo que iba de año, las donaciones de empresas ascendían a 70.500 euros, frente a los 378.000 del Consistorio o sociedades municipales como Pimesa e Intesa. Sin embargo, la situación ha empeorado en los últimos días hasta el punto de que, a día de hoy, se adeudan 1.774 euros a la Seguridad Social, según documentación a la que ha tenido acceso este periódico, y 3.011 euros a la Agencia Tributaria por el IRPF.

"Compromisos morales" con los clubes

La información aportada en las últimas semanas por los clubes siguiendo las instrucciones del vicepresidente de la fundación y concejal de Deportes, Daniel Rubio, evidencia que la entidad tiene pendiente de pagar más de 600.000 euros en concepto de becas y subvenciones a deportistas y clubes, a lo que se suman 35.695,33 euros por facturas pendientes de 2010 y 2011. No obstante, desde el principio, el edil ha subrayado que estas subvenciones responden a "compromisos morales", por lo que, aunque no existe ninguna norma que establezca la obligación de abonar esas cantidades, sí reconoce que, de no pagarse, algunos clubes podrían desaparecer. A ello se une el hecho de que muchos de los colectivos se vieron obligados en su momento a firmar pólizas de crédito.