El comité de empresa de Urbaser manifestó ayer su total oposición a la modificación de las condiciones laborales de 14 trabajadores con contratos a tiempo completo que estaban cubriendo bajas y jubilaciones y que, según indicaron Francisco Ruiz y Antonio Bordonado, presidente y vicepresidente del órgano de representación de la plantilla, van a pasar a tener contratos a tiempo parcial o a media jornada y no pasarán a tener la categoría de indefinidos, como se había acordado.

Los representantes del comité explicaron que ésta es una de las primeras decisiones tomadas por el nuevo gerente de Urbaser, Francisco Díaz, y tienen la sospecha de que no quedará aquí la cosa y que habrá más reajustes y recortes de plantilla "con el argumento de que la empresa está teniendo dos millones de déficit al año", afimaron.

Los miembros del comité acusaron a la empresa de saltarse los acuerdos del último convenio, firmado en junio del pasado año (cuyo incremento salarial quedó congelado aunque ayer, por error se citó un 4,5% de aumento que, en realidad, correspondía al anterior convenio), "pese a que nosotros siempre hemos apoyado todas las modificaciones y no hemos puesto pegas a ningún nuevo servicio a pesar de que no se contó con nosotros", indicó el presidente. En concreto, se refirió a la recogida de basura los domingos por la mañana en El Raval y el centro urbano, así como la recogida de cartón, implantados por el equipo de gobierno del PP en el Ayuntamiento.

Según el comité, todos los trabajos que se realizan en el fin de semana, incluida la recogida en El Raval y el centro, ocupa a 23 empleados "y se paga con horas horas extras. Que no nos vendan que esto es coste cero, como dice el concejal de Limpieza. El Ayuntamiento está pagando a la empresa 1,2 millones de euros anuales en horas extraordinarias", indicó Bordonado.

El comité cuestionó el actual servicio de limpieza y recogida de basura, señalando que se ha descuidado y rebajado la calidad y que hay determinados servicios que ya ni se están realizando. Para el comité este reajuste laboral a 14 trabajadores supone un "despido" en la práctica, ya que "si no lo aceptan se van a la calle".

La plantilla de Urbaser está compuesta por unos 400 trabajadores, de los que 350 trabajan a diario y unos 50 durante los fines de semana. El comité dijo ayer que está dispuesto a convocar, incluso, una huelga si la empresa no reconsidera su decisión.