La Escuela Oficial de Idiomas dio a conocer ayer el resultado del sorteo a través del cual se asignarán las plazas a los futuros estudiantes. En esta ocasión las solicitudes han llegado, entre el centro de Elche y la sede de Crevillent, a las 9.111, casi 3.000 más que el año pasado y más del doble de las plazas que habilita la escuela, que rondan las 4.185. Por lo que muchísimos alumnos volverán a ver truncado su sueño de aprender un idioma.

El sorteo que ayer se llevó a cabo dictamina el orden en el que los interesados pueden matricularse, gestión que tendrá lugar del 15 al 23 de septiembre en las instalaciones de la escuela, siendo los primeros días (15 y 16) los que garantizan plaza segura, mientras que a medida que avanza la semana, las posibilidades se irán reduciendo. Los números más bajos corresponden a los primeros días de la semana, y los más altos a los últimos. Así, cuanto menor sea el número mayor será la probabilidad de entrar en el centro.

Como todos los años el inglés ha sido el idioma más solicitado, seguido del francés. El auge que ha experimentado Alemania como destino laboral para miles de jóvenes españoles, sobre todo después del llamamiento que hizo hace unos meses la canciller alemana, Angela Merkel, solicitando licenciados procedentes de los países periféricos, así como lo rápido que el país teutón se ha repuesto del azote de la crisis, ha hecho que la lengua germana gane enteros como primera opción para muchos estudiantes de la zona. "El alemán está en alza, es un hecho que hemos podido comprobar con el aumento de solicitudes para este idioma", reconocía Ramón Antón Miralles, director del centro.

En el cuarto lugar en cuanto a número de solicitudes se encuentra el italiano, por delante del valenciano y árabe, en ese orden. La lengua arábica ha experimentado un ligero receso con respecto a otros años, según apuntó ayer el responsable de la Escuela de Idiomas.

En Crevillent la situación es prácticamente la misma. La demanda duplica al número de plazas de la escuela, que es de 280, por las cerca de 450 solicitudes que ha recibido, con la salvedad de que durante este curso sólo se podrá estudiar inglés, ya que el francés ha desparecido por falta de demanda, después de que el alemán corriera la misma suerte durante el ejercicio pasado. Antón también apuntó que el centro solicitó incorporar más idiomas a su oferta académica, pero debido al periodo de ajustes y recortes que atraviesa el país, éstas han sido denegadas. "No era la mejor época para implantar más idiomas y más trabajadores", reconocía resignado ayer.