Tras la jornada electoral del domingo y la pérdida de la Alcaldía de Elche después de estar 32 años gobernando el Ayuntamiento, la sensación entre algunos de los dirigentes y miembros de la candidatura del PSOE es que los efectos que esta derrota pueden tener en el futuro del partido, aunque importantes, no tienen porqué ser devastadores. Es más, se piensa, y así lo trasladaba ayer el portavoz electoral y número 6 de la lista, Antonio Rodes, que Elche ha aguantado, y con diferencia, mucho mejor que otras poblaciones de la provincia y la Comunidad la ola a favor que tenía el PP por la crisis económica, la mala imagen de José Luis Rodríguez Zapatero, los 35.000 parados oficiales censados en el municipio y la valoración que se pueda hacer de lo más o menos acertada que haya podido ser la gestión municipal de los últimos cuatro años.

Con todos estos factores en contra el PSOE ha mantenido un suelo electoral prácticamente idéntico al de hace cuatro años. Los socialistas en Elche sólo han perdido 133 votos con relación a las elecciones de 2007, aunque porcentualmente la caída es de casi cuatro puntos ya que hay que tener en cuenta el incremento del censo electoral de los últimos cuatro años en los que se han incorporado nuevos electores. Entonces obtuvieron 43.595 votos y ahora 43.462, según el escrutinio provisional.

Rodes considera, como otros dirigentes, que el PSOE, en Elche, pese a perder la Alcaldía al quedarse con 12 ediles frente a los 14 del PP (que ganó un concejal), se ha realizado una campaña que ha tenido un efecto positivo para el mantenimiento de este suelo electoral. Por otro lado, mantiene que los 6.143 votos más que ha sacado el PP respecto a los comicios de hace cuatro años, "son votos que dentro de cuatro años lo más seguro es que los pierda. El PP ahora ha recogido votos nuevos que en condiciones normales no los tendría", apuntó.

Entre este respaldo electoral, podrían estar los "votos útiles" de gente desencantada y potencial votante del PSOE, votos que inicialmente podrían haber tenido como destino el Partido de Elche, que esperaba ser la llave del futuro gobierno, y de la bolsa de los 2.447 nuevos electores.

Saber hacer buena oposición

Por otro lado, aunque el secretario general y candidato, Alejandro Soler, aún no se ha pronunciado, entre los cuadros dirigentes del partido se piensa que los próximos cuatro el PSOE no sólo debe "aprender" a ser oposición en Elche, sino que debe llevarla a cabo de una forma muy reflexionada y con buenas estrategias en el debate argumental de los asuntos municipales. "No vamos a dejar de denunciar si se produce un caso de corrupción o una irregularidad, pero no podemos pasarnos cuatro años con eso. Hay que hacer una oposición pensando, sobre todo, en las necesidades de la gente", comentaba ayer otro dirigente.

Además, el PSOE de Elche no abordará ningún proceso de renovación en la ejecutiva que dirige Alejandro Soler, vicesecretario general también del PSPV-PSOE, probablemente hasta después de las próximas elecciones generales, si se mantiene la fecha de marzo de 2011 y no se adelantan, según las fuentes del partido consultadas.

De este modo, el PSOE ilicitano seguirá, además, la línea secuencial que pasa primero por el congreso federal, posteriormente el de País Valenciano y, finalmente, los congresos provinciales y locales.