En el colegio La Paz de Torrellano llevan dos meses trabajando de manera continua para dar a luz el elemento que no puede faltar en su final de curso. Su monumento fogueril de este año lleva por lema "Un mar de diversión" y va a servir de continuación a los temas marinos que elaboraron y mostraron durante el pasado carnaval.
Con más de 4 metros de altura, su hoguera estará presidida principalmente por un faro con una balconada, y a sus pies, un gran número de seres marinos, con lo que se conformará como una hoguera llamativa y al tiempo divertida.
Son más de 300 alumnos los que aquí ponen su granito de arena, pero el profesorado y los padres también se vuelcan en intentar crear una hoguera mejor cada año. Además, empresas de la pedanía desinteresadamente donan productos y material.
Prácticamente son 20 años de tradición en este centro, casi los mismos que en el colegio Jorge Guillén, donde en este caso la hoguera hablará de la música de los cuentos.
Aquí, desde el primer trimestre, los 451 alumnos han estado realizando todo tipo de tareas y elementos que integrarán el monumento, aunque habitualmente sexto de Primaria lleva buena parte del peso. Y como ocurre en el colegio La Paz, padres y profesores tampoco fallan a la hora de colaborar en esta creación artística, que se prevé que tenga casi 5 metros de altura y que se plantará y quemará el próximo 22 de junio.
En el colegio Els Garrofers son de los más tempranos. Este pasado fin de semana ya han empezado a plantar su hoguera, que lleva por lema "Miguel Hernández", y que será pasto de las llamas el próximo viernes.
En Torrellano, la hoguera se plantará este jueves y arderá al día siguiente. En los tres centros, habrá fiesta escolar, merienda o cena y los bomberos proporcionarán la tradicional banyà.
