?

El desarrollo de proyectos urbanísticos de La Marina, concentrado especialmente en los sectores MR-10, MR-6 y MR-2 (franja que va desde la carretera nacional en dirección a la playa) va a quedar aplazado y supeditado a la revisión del actual Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), por lo que de momento se descarta cualquier actuación en cerca de 40.000 metros cuadrados de suelo urbanizable donde estaba prevista la construcción de más de 1.600 viviendas.

Así lo decidió ayer la comisión municipal de Urbanismo, que desestimó una propuesta realizada el pasado día 5 por la Agrupación de Interés Urbanístico del sector MR-10 (más de 1.000 viviendas en 250.000 metros cuadrados) solicitando al Ayuntamiento la convocatoria de bases y concurso público para desarrollar dicho sector. La actuación en este sector, no exento de polémica por la oposición de cerca de cuarenta vecinos que habitan actualmente en casas aisladas, ya quedó anulada en mayo del pasado año al alegar el Ayuntamiento que el proyecto urbanístico presentado no contemplaba las conexiones de las infraestructuras hidráulicas necesarias.

Alejandro Pérez explicó que "la Agrupación de Interés Urbanístico nos ha vuelto a realizar una solicitud para iniciar un nuevo proceso, pero tras realizar un estudio técnico y jurídico, sopesar alternativas y ver la oportunidad temporal de la petición, se ha acordado desestimar la solicitud. Esto se ha decidido tras mantener reuniones tanto con la parte interesada en la promoción de viviendas como con los vecinos, la alcaldesa pedánea, etc. También se ha valorado que es necesario mantener una coherencia con el modelo territorial y el crecimiento urbanístico de Elche. A diferencia de lo que se nos podía presentar en los años 2006 y 2007, ahora vemos que el entorno del sector MR-10 no se ha urbanizado. Es el caso de los sectores contiguos, como el MR-2, MR-7 y MR-8, y si se actúa en el MR-10 se crearía una situación de discontinuo urbano con una zona urbanizada y su entorno sin urbanizar", señaló.

El edil de Urbanismo añadió que tras aprobar el pleno en junio del pasado año iniciar una revisión del actual planeamiento urbanístico de Elche, "pensamos que es en este marco donde mejor se pueden estudiar los futuros desarrollos de La Marina. Vamos a ver cómo se puede abrir Elche al litoral, pero haciéndolo de una forma inteligente, que nuestro litoral no sea más de lo mismo, sino algo distinto", dijo.

El concejal se refirió a la ampliación del aeropuerto de El Altet y la estación del Ave de Elche como dos infraestructuras "que también modifican la estructura del territorio y la relación de la ciudad con su entorno".

Con relación al sector MR-2, que comprendía una actuación sobre 108.000 metros cuadrados y la previsión de 600 nuevas viviendas, la comisión decidió ayer descartar igualmente cualquier actuación de acuerdo con informes técnicos que, según Alejandro Pérez, "desaconsejan un desarrollo en una zona que empezó su tramitación en el año 2002 y que ahora se ve afectada por todos los cambios que han habido en las normativas urbanísticas valencianas".

La comisión también aprobó una moción que se dirigirá a la Generalitat en relación al mantenimiento de los montes públicos del término municipal. Además, la comisión especial de edificios protegibles dio el visto bueno al proyecto presentado por el arquitecto Antonio Serrano Bru para la restauración de las ocho ventanas y vidrieras del cimborrio de la basílica de Santa María que fueron colocadas en el año 1957 y que se encuentran en un deficiente estado de conservación. El presupuesto para esta obra es de 150.000 euros.

El urbanista Alfonso Vegara aportará ideas

EL concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Elche, Alejandro Pérez, comentó ayer que se pedirá al arquitecto y urbanista Alfonso Vegara, presidente de la Fundación Metrópoli con la que el Ayuntamiento ha contratado los servicios para la realización de un estudio previo a la revisión del PGOU, "ideas y propuestas específicas para aplicar en La Marina". Por otro lado, el concejal manifestó su sorpresa por el hecho de que "el grupo popular haya mantenido una actitud de total pasotismo en la comisión, absteniéndose en estos asuntos sin hacer preguntas, intervenir o explicar cuál era su posición".

El urbanista Alfonso Vegara, junto con su equipo de trabajo, deben trazar las grandes líneas sobre las que podría desarrollarse el futuro de la ciudad desde el punto de vista del territorio y teniendo en cuenta las actuales potencialidades del municipio, así como sus debilidades.

La adjudicación de este trabajo a Vegara, presupuestado en 500.000 euros, ha provocado cierto malestar en la Asociación Técnico Empresarial de la Construcción de Elche (Ateco), que pidió que se contratara a profesionales de la ciudad.