La sala de lo contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana ha dejado sin efecto la reforma del reglamento de la Sindicatura de Greuges que impuso el PP en junio. En la práctica ello supondrá el regreso de Emilia Caballero, propuesta a instancia del PSPV, al cargo de Síndica interina ya que las Cortes no recurrirán. El auto recoge que la reforma del reglamento que aprobó el PP para apartar a Caballero vulnera el principio de jerarquía normativa.

La adjunta primera, Emilia Caballero, podrá retomar de forma interina la presidencia de la Sindicatura de Greuges. El Tribunal ha desestimado el recurso de súplica presentado por las Cortes al auto judicial que dejaba sin efecto la modificación del reglamento de organización y funcionamiento de la Sindicatura de Greuges, un cambio que el PP promovió para apartar del cargo a Caballero, propuesta en su momento a instancias del PSPV-PSOE. Además, el tribunal se declara competente para decidir sobre la posible vulneración de la ley a través de la modificación del reglamento y también tumba el recurso del PP que planteaba un conflicto de competencias al considerar que la sala de lo contencioso-administrativo del TSJ no podía dirimir cuestiones parlamentarias.

En concreto, la decisión judicial deja en suspenso el turno rotatorio que aprobó el PP para que el adjunto segundo, Carlos Morenilla, marido de la consellera Angélica Such, pudiera relevar a Caballero en el cargo durante los dos próximos años y después establecía la rotación de seis meses.

Los magistrados concluyen que el sistema de sustitución del Síndic de Greuges debe ser el previsto por la ley de funcionamiento y no por el reglamento que el PP modificó unilateralmente. Además, el varapalo judicial es doble ya que el auto señala que el órgano que puede instar la modificación del reglamento de la Sindicatura de Greuges es la propia institución y no un grupo parlamentario, en este caso el PP. Ayer, la presidenta de las Corts, Milagrosa Martínez, telefoneó a Carlos Morenilla, autoproclamado Síndic el pasado 1 de julio, para comunicarle el contenido de la resolución y que por tanto deberá cesar en su cargo en cuanto la decisión judicial se publique en el diario oficial.

El auto que avala el regreso de Emilia Caballero y la repone como Síndica de Greuges en funciones supone un serio revés para el Ejecutivo de Camps. Caballero ha sido desde hace más de dos años una especie de piedra en el zapato, especialmente en la denuncia de los problemas en la aplicación de la Ley de Dependencia.

La elección de un nuevo Síndic sigue estancada y la institución que vela por los derechos de los ciudadanos frente a la Administración lleva en la interinidad dos años y medio, desde que se agotó el mandato de Bernardo del Rosal en abril de 2006, que el PP no renovó al considerarlo zaplanista. El nombramiento requiere una mayoría cualificada y, por tanto, el acuerdo de PP y PSPV, que ya alcanzaron un pacto para convertir en Síndic al vicepresidente de las Corts, José Cholbi.

Horas antes de difundirse el fallo, el portavoz del PP, Ricardo Costa, ofreció al socialista Angel Luna consumar el nombramiento del nuevo Síndic en la figura del vicepresidente de las Corts José Cholbi. Fue durante la cena de Navidad que los diputados celebraron el miércoles por la noche.