L os servicios urbanísticos municipales, la Concejalía de Bienestar Social, la Policía Local y el Parque Comarcal de Bomberos tuvieron que coordinarse ayer para dar una solución urgente a dos familias que vivían en un antiguo edificio del barrio de El Raval que ha tenido que ser desalojado. El inmueble tiene más de medio siglo y se encuentra situado en la calle Filet de Dins número 3. De los tres pisos, todos ellos de alquiler, dos estaban ocupados por familias ilicitanas.

El problema se detectó a primera hora de la mañana, después de que se hundiera parte del suelo de la cocina de la planta baja, por lo que se requirió en el edificio la presencia de una brigada del Parque de Bomberos y de la Policía Local. Los agentes se encargaron de dar aviso a los servicios urbanísticos municipales para que emitieran un informe al considerar que la familia que vivía en él, con una joven de 25 años que sufre parálisis cerebral, no podía seguir en estas condiciones. En el piso superior también fue desalojado el otro inquilino, que es un hombre que vive solo y hermano de la otra inquilina.

Los técnicos municipales requirieron al propietario del inmueble para informarle de lo ocurrido y en el dictamen preliminar se llegó a la conclusión de que el edificio, a priori, no está en ruina y que el hundimiento se produjo por una tubería de agua rota que ha estado filtrando y provocando todo tipo de humedades hasta que ha terminado por hundir el suelo. Por este motivo se decidió cortar el suministro de la red general de agua potable a todo el inmueble, ya que la tubería principal pasa por debajo de la planta baja. Al carecer de agua, el Ayuntamiento tuvo que realojar a estas personas en un hotel porque no tenían dónde ir, hasta que se resuelva el problema. Los técnicos también tienen previsto en las próximas semanas comprobar el estado general de la vivienda al tener más de medio siglo.