«Basamos todo en el colectivo. Es nuestra fuerza». El entrenador del Elche José Rojo, Pacheta, apeló ayer a la cohesión y al compromiso solidario de sus jugadores como las claves del equipo para haber alcanzado la fase de ascenso a Primera División, que esta noche (22.00, Movistar) les mide con el histórico Real Zaragoza en el partido de ida de semifinales.
«Es fundamental creer en una idea; que el jugador crea en él y en el compañero; que corras por ti y por el que está al lado», explicó el técnico en comparecencia telemática desde el hotel de San Pedro del Pinatar en el que se ha concentrado el Elche para preparar este asalto a Primera cinco años después del descenso administrativo de 2015.
«El entrenador debe molestar poco, pero hemos potenciado esta idea para ser más fuertes; que el jugador crea en lo que hace para ganar confianza», agregó. «Y la creencia del jugador es lo que nos hace diferentes», recalcó.
El técnico burgalés recordó que en los dos partidos de LaLiga regular ganados por el conjunto maño a los franjiverdes (1-0 en La Romareda y 1-2 en Elche) se dieron «circunstancias especiales» que favorecieron al Zaragoza, pese a la buena actuación de sus hombres en ambos encuentros. «Si no estás acertado contra un grande, lo acabas pagando», indica el preparador, convencido de que su equipo «está concienciado» para competir y afrontar la eliminatoria con «plenas garantías».
Pacheta considera «muy importante» contar en su vestuario con jugadores como Nino y Manuel Sánchez, que ya tienen la experiencia de haber ascendido a Primera en un «play-off» con el Osasuna, así como otros siete jugadores que subieron a Segunda A por el mismo sistema de competición.
Al comparar esta fase de ascenso con la del Elche a Segunda A hace dos años y dos meses, el entrenador asegura que no se fija en la entidad de los rivales, ni en el número de partidos -ahora son dos eliminatorias y no tres como en la anterior-, «sino que sólo miramos lo inmediato, el próximo partido; el camino es lo que nos lleva hasta allí».
También quiso recordar que en el último ascenso franjiverde a la categoría de plata en 2018 se midieron con dos filiales muy potentes, Villarreal B y Sporting B, «en los que jugaban futbolistas que ahora militan en Primera y Segunda División».
Por vez primera, la fase de ascenso se juega a puerta cerrada. Sobre la ausencia de público por la pandemia, el técnico franjiverde sostiene que el «factor campo» pierde influencia y lamenta que los dos estadios con mayor capacidad de LaLiga, el Martínez Valero y La Romareda, no puedan abrir sus puertas a más de 30.000 aficionados en los dos partidos.
En cuanto al formato de la competición, Pacheta cree que hubiera sido mejor un sistema de «play-off exprés» a partido y con sede únicos para resolver la tercera plaza de ascenso a Primera, que acompañará a Huesca y Cádiz, y ensalzó el sacrificio de su equipo para soportar «la presión y el estrés» de los últimos meses, «que no l0 aguanta el ser humano».
«Estuvimos dos meses confinados, luego un mes de entrenamientos individuales, un mes y medio jugando domingo-miércoles, tres semanas de entrenamiento sin saber si vas a competir y ahora encerrados en un hotel para esta eliminatoria», resumió el técnico, que volvió a resaltar la ilusión con la que afronta el «play-off» su equipo, frente a la presión y la obligación por el ascenso de los otros tres aspirantes de la promoción: Zaragoza, Girona y Almería.
