De problema a solución. Ese es el cambio que quiere el Elche para el Martínez Valero de cara al último tercio de campaña. Y en el vestuario franjiverde son conscientes de que será necesario un giro de 180 grados en los resultados como local para poder mantener el nivel del curso. En Tenerife ya quedó demostrado que sumar fuera no es tarea sencilla cuando se acerca el final de campaña y la puntuación en la ciudad de las palmeras debe crecer.

Hasta el momento, los ilicitanos sólo han obtenido 18 puntos en los 14 partidos disputados en el estadio Martínez Valero. Una cifra muy baja. No por ser el quinto peor local de la categoría este curso sino por la debacle que se produce al comparar los números de la actual escuadra franjiverde con la de los últimos 20 años de historia del Elche.

El conjunto ilicitano no sumaba tan pocos puntos en la categoría de plata a estas alturas de competición desde la 2000/01. Entonces eran 16, dos menos que ahora. Aquel era un equipo que peleaba por evitar el descenso, todo lo contrario que el actual, que va sexto en la tabla gracias a su notable rendimiento como foráneo.

Pese a que es cierto que el Elche ha dejado mejores sensaciones que números en sus partidos en el Martínez Valero, la realidad es que las cifras no engañan. Especialmente si se extrapolan a otros cursos y sales perdiendo con todos. La cita de esta tarde frente al Numancia se antoja como fundamental para el cambio de chip, al tratarse de uno de los equipos a los que más les cuesta puntuar como visitante en Segunda.

Sin triunfos «nobles»

El rendimiento del Elche como local decae especialmente frente a los equipos de la primera mitad de la tabla clasificatoria. Es decir, contra los rivales directos de los franjiverdes, al menos de momento. Este dato sería especialmente preocupante en caso de un posible «play-off», en el que la fortaleza en casa se antojaría fundamental para decantar las eliminatorias. Dicho sea de paso, bendito problema este para un futuro no muy lejano del Elche.

De las cuatro victorias que ha cosechado el Elche en el Martínez Valero (Ponferradina, Mirandés, Racing de Santander y Málaga), el equipo mejor ubicado en la clasificación es el castellano-leonés, que a la conclusión de la jornada 29 era duodécimo. Por lo tanto, los franjiverdes no han sido capaces de ganar en su feudo a ninguno de los once primeros de la tabla. Frente al Numancia (noveno) tendrán una nueva oportunidad.

De los diez clubes que conforman la primera mitad de la clasificación de Segunda División junto al Elche, a los ilicitanos les queda recibir a tres en su coliseo: Numancia (hoy), Girona en la jornada 34 y Cádiz en la 37.

Del resto, los discípulos de Pacheta sólo han sido capaces de empatar frente a Almería, Huesca, Rayo Vallecano y Alcorcón. Todos estos partidos acabaron, curiosamente, con el mismo resultado: 1-1. En tres de ellos (todos menos frente a los oscenses), el Elche empezó ganando. El balance sería de 4 puntos sobre 21 posibles.

Zaragoza (1-2), Fuenlabrada (0-2) y Sporting de Gijón (0-1) se llevaron todo el botín del Martínez Valero en sus visitas de esta campaña. Ante los maños, hace dos semanas, la imagen no fue ni mucho menos mala. El Elche resistió los mejores minutos del conjunto aragonés en el primer tiempo, consiguió igualar el choque y encajó el 1-2 cuando estaba mejor asentado sobre el terreno de juego. Frente a madrileños, en la jornada inaugural del campeonato, y asturianos, la imagen fue mucho peor, aunque ambas derrotas se produjeron a principios de campaña.

El Elche quiere tres puntos esta tarde para quitarse cualquier posible duda en el Martínez Valero. Es hora de hacerse fuertes en casa, asentarse en la zona noble de la tabla y quitarse el mal de altura que sufre durante los últimos meses como local. Todo ello pasa por derrotar al Numancia.

Día especial para Pacheta, Dani Calvo y Pere Milla

El duelo frente al Numancia será especial para tres franjiverdes con pasado en Soria. El primero de ellos, el técnico Pacheta, que fue jugador, director deportivo y entrenador en el Numancia. Dani Calvo y Pere Milla lucieron la elástica rojilla. El central entre 2014 y 2019, el atacante en la 2017/18.

En el bando contrario también habrá reencuentros. El que más morbo levanta es el de Iván Calero, descartado por el Elche el pasado verano y baluarte soriano en el lateral derecho. Se le seguirá con lupa. El meta suplente Juan Carlos jugó en Elche cedido por el Villarreal durante la temporada 2011/12.