El técnico del Elche, José Rojo, Pacheta, mostró su satisfacción por el triunfo (0-2) en el campo del Almería, líder hasta ese momento de Segunda División. El preparador burgalés también dio por hecha la marcha de Gonzalo Villar a la Roma, a falta de hacerse oficial: "Si le pongo se me rompe. Pesa dos kilos menos por el estrés de la situación. La decisión ha sido mía y yo no quiero hacerle daño".

Pacheta marcó como punto clave del encuentro la tarjeta roja a Dárwin Núñez en los últimos minutos de la primera parte. Hasta ese momento, el uruguayo estaba siendo un quebradero de cabeza para la defensa ilicitana. "El partido ha estado condicionado por la expulsión de Dárwin. Ha sido clave. Estábamos bien hasta ese momento, pero es que es un futbolista excepcional. No hay otro 9 así en Segunda. No sé si son amarillas las dos, para eso está la tele. Me voy satisfecho porque hemos sido capaces de sacar el partido adelante", apuntó.

"Lo hemos visto hasta con diez. El Almería es un candidato claro a quedar primero. Venir aquí y ganar, aunque sea contra diez durante 55 minutos... no es fácil", agregó el entrenador franjiverde. Sobre el fallo del penalti y la posterior reacción de Fidel (gol y asistencia), Pacheta aseveró que "seguramente hayan venido los fantasmas de la Copa", pero destacó la experiencia del onubense para reponerse y la excelente reacción del equipo.

Por último, el técnico no cambió el objetivo de los suyos pese al triunfo en Almería, campo del líder, y a la buena clasificación con la que acaba el Elche la jornada. "Quedan 14 puntos para llegar a los 50. Es lo único que me da esta victoria. Espero que esto no nos vuelva locos", afirmó.