Christian Bragarnik sigue conociendo de primera mano los entresijos del Elche, club del que es propietario desde el pasado martes. Tras unos primeros días en los que se han sucedido las reuniones para trazar las líneas de su plan, a poner de marcha con el cambio de año (Junta de Accionistas y apertura del mercado invernal), el argentino espera volver a casa con un boceto claro de las líneas a seguir. Estas son algunas de las claves de su llegada.
¿Cómo han sido sus primeros días como propietario?
Un maratón de reuniones. El argentino ha tratado de pulsar la realidad actual de la entidad, tras las largas negociaciones con José Sepulcre, finiquitadas el pasado martes. Se ha reunido con Patricia Rodríguez y con Nico Rodríguez, cuyas continuidades están en el aire una vez se reorganice el equipo directivo, además de con Pacheta, y se ha presentado formalmente a la plantilla. Le han acompañado dos de sus hombres de confianza. Aún no ha citado al resto de empleados y ha preferido no presentarse oficialmente ante los medios de comunicación. El «Plan Bragarnik» debe ponerse en marcha tras la Junta de Accionistas del próximo día 30. A ella acudirá tras haber viajado a Argentina con sus ideas ya trazadas. Mañana se espera que acuda al Ramón de Carranza.
¿Cómo afectará el cambio de la propiedad en lo deportivo?
En menos de 48 horas empezará a resolverse esta posible duda. Y no se trata de una cita sencilla. El Elche visita al Cádiz, sólido líder de la categoría, que además viene de perder a domicilio. Los gaditanos están invictos como locales este curso (sólo han cedido un empate, frente al Deportivo en septiembre). Bragarnik espera «debutar» con buen pie, compitiendo en el feudo más complicado y, si puede ser, llevarse los tres puntos a Argentina como regalo de Navidad anticipado. Por su parte, Pacheta aseguró en rueda de prensa que la plantilla está al margen del cambio de dueño y que el nuevo propietario le ha transmitido «tranquilidad, normalidad, respeto y confianza».
¿Habrá una gran revolución en el próximo mercado invernal?
Bragarnik quería cerrar la compra del Elche antes del 1 de enero para poder trabajar con vistas al mercado invernal, en el que está dispuesto a reforzar la plantilla. De momento no se conocen sus intenciones de primera mano, aunque la idea inicial pasa por incorporar dos o tres piezas y no por una gran revolución, para la que además haría falta un potente desembolso económico. Otro enigma es si los fichajes vendrán desde Sudamérica, a través de su cartera de futbolistas, o se apostará por nombres consolidados en el fútbol español. Pacheta ya explicó que no pedirá jugadores en concreto sino perfiles que considera necesarios para fortalecer su plantilla. Más temas a tratar serán las renovaciones, con la de Óscar Gil acordada; y casos de jugadores que apenas cuentan para el cuerpo técnico franjiverde, como el del propio Danilo Ortiz.
¿Qué hay de cierto en la fama que le rodea en América?
El nombre de Christian Bragarnik corre como la pólvora al otro lado del Oceano Atlántico. Está considerado como una de las personas más influyentes en el fútbol sudamericano y su figura no está exenta de polémica. Quienes le han tratado en tierras ilicitanas aseguran que ese cartel no responde a su trato personal, que es una persona de fútbol, alejada de excentricidades. Los rumores en torno a la figura de Maradona parece haberlos despachado durante sus primeras conversaciones con Pacheta.
¿Por qué un representante compra un club de fútbol?
El caso de Bragarnik no es único. Varios representantes de renombre se están moviendo en los últimos tiempos en operaciones de compra de clubes de fútbol, en diversos continentes. La guerra de la FIFA, primero contra los fondos de inversión, y últimamente contra los representantes para tratar de disminuir su influencia en torno a la pelota, ha llevado a estos a mover ficha y a adquirir clubes en los que continuar sus proyectos en el fútbol.
¿Volverá con Bragarnik y sin Sepulcre la paz social al Elche?
Uno de los principales problemas que ha tenido el Elche en los últimos años es la ruptura de la paz social en su entorno, fruto de los acontecimientos que se avivaron durante el verano de 2015, en el que la entidad acabó sufriendo el descenso administrativo a Segunda División. El estadio Martínez Valero ha ido perdiendo espectadores y el accionista minoritario ha dejado de acudir a las Juntas. Con la marcha de José Sepulcre, figura muy señalada por parte de la afición, está por ver si hay cambios en este sentido y vuelve la paz social.
¿Se desjudicializará por fin la entidad franjiverde?
El cambio de propiedad no pone fin a varios conflictos que siguen abiertos en diversos juzgados. De hecho, este ha sido uno de los puntos más difíciles de cerrar en la operación de compraventa. Entre los principales frentes están el «Caso Petxina», recurrido ante el Tribunal Supremo, la resolución de Bruselas por supuestas ayudades ilegales del Estado o la batalla con el IVF en el juicio del concurso de acreedores, que permitió a Sepulcre voltear el accionariado, controlar el club y, posteriormente, venderlo.
